En la primera entrega de este ciclo de 5 artículos —¿Cuál es tu papel?—, exploramos los niveles de atracción masculina. En la segunda entrega, comprendimos cuál es la mentalidad que debemos tener para construir relaciones sólidas.
Entonces… entrando más a concretar: como hombre a corto plazo —sobre todo si empezamos en escalones muy bajos, en estadios muy bajos—, tu primera tarea es detectar si ella está interesada en ti y si no lo está, activar ese interés, ¿de acuerdo?
Activa su interés
Y para eso, hay dos formas de hacerlo: una —que es correcta— y otra —que es incorrecta. Y cuando digo incorrecta, digo que puede funcionar, lo puedes conseguir, pero estamos hablando de cortoplacismo—, que es, por ejemplo: —Voy a aprender a tocar la guitarra porque ligo más tocando la guitarra. O eso me han dicho— ¡Meeeec! Error.
¿Te gusta la guitarra? ¿Quieres aprender a tocar la guitarra? Aprende a tocar la guitarra.
Ahora, ¿qué pasa…?
Hay gente, incluso, que aprende a tocar la guitarra porque le gusta, pero luego no le gusta «vacilar» o mostrarlo… Hay gente así: —Es que quiero que me quieran por lo que soy…
¡Perdona! Tocar la guitarra es parte de ti, lo has querido, es una habilidad que tu has desarrollado desde dentro. Así que, ¡coño!, disfruta de ella.
Eso no significa que vayas a ir a una fiesta en la playa —por ejemplo— y te lleves la guitarra para vacilarle a las nenas. No, tu vas ahí a pasártelo bien, a tocar la guitarra, a cantar con tus colegas y, evidentemente, eso puede tener un efecto secundario, que ella diga: —¡Ay! El de la guitarrita…— ¿De acuerdo?
Igual que este ejemplo —así, un poco chorra que he puesto—, cualquier cosa. No trates de hacer algo para llamar la atención de los demás porque eso tiene los pies cortos. Eso, en el momento en que la persona, en el momento en que las chicas no te hagan caso, dirás: —¡Aggg! La guitarra es una mierda, ¡fuera!—. Evidentemente, es que no querías tocar la guitarra. Querías ligar, querías lo que sea.
—Voy a aprender a bailar porque en el vale dicen que se liga mucho.
Que bien, que sí, que se puede ir, que puede funcionar… Pero yo te recomiendo que vayas a aprender a bailar también. Que disfrutes del baile. Que, evidentemente, el baile te puede traer un gran “huerto” —que llamamos—, te puede traer a muchas chicas interesadas en conocerte. No te voy a decir que no, te puede abrir muchas puertas, pero te va a abrir muchas más puertas cuando disfrutes del baile, que si vas al baile para…
Si vas al baile para… Además, —¡snif! ¡snif!— Ellas lo huelen, dicen: —Aquí no hay proyección de futuro. Este tío viene a lo que viene—, en seguida, porque ése es el papel de ellas… que voy a explicar más adelante.
Entonces, búscate actividades, cosas que a ti te gusten hacer y que, evidentemente, puedan ser atractivas para todo mundo y, en especial, para ellas también, ¿de acuerdo?
Pero, sobretodo, que tú lo disfrutes, ¿vale? Que estés a gusto, que sea tu hábitat, que nazca de dentro, ¿vale? Que estés a gusto, que sea tu hábitat, que nazca de dentro.
Activa tu atractivo
Bien, entonces, si su interés no está activado… pues lo vamos a activar con nuestras habilidades. Siempre haciéndolo desde el corazón. Siempre haciéndolo, no para llamar la atención sino para imponernos —en el sentido de imponer tu presencia, de crear atracción—, que la gente diga: —¡Uy! Ese chico, mira, me llama la atención—. Tanto hombres como mujeres… Que no seas algo que pase desapercibido.
Tampoco se trata de que seas el centro de la fiesta y que moles un montón y que seas el crack. No es tampoco eso. No hace falta tanto.
Hace falta diferenciarse, distinguirse, que la gente diga: —¡Mmm! Curioso, me llama la atención por «algo»— que puede ser cualquier cosa.
Puede ser que seas una persona extrovertida y socialices con mucha gente. Puede ser que seas tímido y que sólo hables con gente puntual y que tus conversaciones sean profundas. Y, para ello, lo ideal va a ser que tengas una conversación profunda, interesante y que le pueda interesar también a tu objetivo —esa chica que te está llamando la atención— y la tengas cerca de ella. Que ella pueda reparar en tu presencia.
Desde luego, si te pones detrás de un pilar escondido detrás de dos muros es difícil que ella repare en tu presencia…
Entonces, ¿cómo conseguimos llamar su interés? Ya te digo, hay 1000 formas, depende de tu persona: de quién eres y en el estadio que estás. Son 1000 factores, pero ése es tu papel. A corto plazo es tu responsabilidad llamarle la atención. No es tu finalidad y no es tu vida, es tu responsabilidad, si lo que quieres es conocer esa persona.
Una cosa es responsabilidad y otra es obligación y otra cosa es finalidad: —No, no, voy a hacer lo que sea necesario—. Bueno, sí, lo que sea necesario pero sin perderme yo. No voy hacer «todo lo posible». No es «todo lo posible» es «lo necesario». Lo mínimo, lo que tienes que hacer: tu trabajo —y hacerlo lo mejor que sepas. Nada más.
Pero no desvivirte, no cambiar tu rumbo totalmente, no tienes que hacer más de lo que tienes que hacer porque entonces estás, en este caso, quitándole un trabajo a ella que es su trabajo.
Ella tiene su trabajo, ¿de acuerdo? Ella tiene su trabajo. Es importante, su rol, su papel, su responsabilidad. Es su responsabilidad enterarse. Aunque suene un poco: —¿cómo?— Sí, es su responsabilidad.
¡Ojo! Ahora, tú tienes que hacer las cosas bien para que ella haga las suyas, normalmente. No voy a entrar tanto en detalles. Es muy extenso esto, pero quiero que se te quede un poco esa idea, ¿de acuerdo?
Cuando la atracción te lleva a la interacción
Bien, una vez ya estáis interactuando —ya estáis hablando, ya estáis teniendo una comunicación—, a partir de ahí tu sigues haciendo tu papel, tu rol que es seguir proyectando esa presencia atractiva —que no te voy a decir cómo se hace, en esta serie de artículos sólo te voy a decir qué se hace. El cómo se hace llevaría a enciclopedias y, de hecho, ya estoy haciendo cursos enfocados a ello. Aquí voy a hablar sólo de los «qué». Porque si no, no acabaría nunca y, aún así, parece que va a ser una serie de artículos extensa…
Bueno, una vez que estáis en esa interacción, tu sigues proyectando ese atractivo que va a hacer que ella vea en ti cosas interesantes y que quiera conocer más y, desde luego, le vas a guiar, le vas a mostrar tácitamente, en la mayoría de los casos —es decir, por tu actitud, por tu forma de responder, por tus expectativas— le vas a guiar, le vas a mostrar el camino para que ella invierta y pida más y quiera más. Y ella apruebe y desee que tú sigas escalando, ¿de acuerdo?
Ése es tu papel ahí para que, evidentemente en un medio-corto plazo, la relación llegue a un encuentro sexual, etcétera.
Ahí empiezan a cambiar, un poco, las dinámicas pero, si lo hemos estado haciendo bien desde el principio, si no hemos hecho su trabajo y ella no ha hecho nuestro —que no es siempre 100% así. A veces, uno hace por el otro. En fin… No es matemático, pero para que nos entendamos un poco: si hacemos el trabajo que nos corresponde a cada uno llegaremos a un punto en el cual, después del sexo, no van a haber cambios radicales.
Evidentemente, porqué también estáis educados y ella va a entender cuál es su papel: cuándo tiene que responder a un mensaje… —porque, también, hemos enviado un mensaje adecuado.
¡Ojo! Tu responsabilidad es tu responsabilidad y la suya es la suya. Pero, si hacemos mal nuestro papel no esperemos que ella haga bien el suyo. Que, a veces, pasa. Ellas, a pesar de nuestra mala ejecución —por el interés, por circunstancias personales…—, acaban haciendo más cosas de las que debieran, o sea, hacen nuestro trabajo.
Pero vamos, yo soy partidario de que aprendamos a hacer nuestro rol, a cumplirlo: nuestra responsabilidad. Y ella que aprenda —le guiemos— a hacer la suya.
Este es tu rol. Esto es lo que a ti te pertenece. Y ahora vamos a ir con ella:
Pero esto será la semana que viene —no olvides suscribirte para recibir tanto los siguientes artículos como publicaciones que no están reflejadas en el blog y, si quieres repasar los dos artículos anteriores aquí los tienes: 1, 2.
Continuará: ¿Cuál es tu papel? Su trabajo —4 de 5.
Un abrazo y te espero la semana que viene con el siguiente artículo.
David García dice
Estoy de acuerdo a medias con lo de si no te gusta bailar o tocar la guitarra y solo lo haces por lugar, mejor no lo hagas. ¿Como sabes que no te gusta algo si nunca lo has probado? ¿Y si crees que algo no te gusta porque tienes unas ideas preconcebidas sobre cómo es esa actividad y cuando lo pruebas te descubres a ti mismo disfrutándolo y ves que no tiene nada que ver con como creías que era?
En mi caso yo me apunté a clases de baile porque cuando empecé en el mundillo de la seducción era de los que no se atrevía a despegar el codo de la barra, me aterraba bailar porque no tenía ni idea y cuando miraba a mi alrededor solo veía hombres borrachos que bailaban porque les daba igual todo, otros que hacían el ridiculo para llamar la atención y los que se movían discretamente para disimular fingiendo que se divertían. Con suerte en toda la discoteca había uno o dos hombres que bailaban bien y se divertían y yo no quería ser de los anteriormente mencionados, así que un día me planté en una academia de baile para aprender a moverme y soltarme. Eso fue en 2011 y a día de hoy el mundo del baile es mi principal huerto de chicas hasta el punto en que paso de salir a discotecas que no sean de ritmos latinos salvo días excepcionales.
Desde mi punto de vista el mundo del baile es algo que todo estudiante de seducción debería probar al menos un mes y si después de eso está convencido de que no le gusta de acuerdo, pero independientemente de que acaben ligando o no sus beneficios son incontables en lo referente a al aprendizaje de habilidades sociales. La pega de esto es que aparecen babosos por las clases y por la pista precisamente por dar estos consejos ?
En cuanto al resto de cosas como tocar guitarra o lo que sea, si lo que los mueve es ligar más, bueno… al menos les hará entrar en contacto con una actividad que de otro modo no habrían tocado, con un poco de suerte saldrá un gran músico y sino pues nada. En cualquier caso es mejor que que se queden frente a la play en casa.
Ray Havana dice
Hola David,
Estoy totalmente de acuerdo contigo. De hecho, la mayoría de los «grandes descubrimientos» han sido por «error»: se buscaba «x» y se encontró «y», resultando ser un gran descubrimiento.
Así que, si al ir a baile «para ligar» —algo que considero inadecuado y como bien apuntas se llena de «babosos» porque su fin no es el mismo que fue el tuyo: mejorar— se acaba disfrutando del baile y teniendo una nueva forma de «vida», bienvenida sea.
En cualquier caso, lo que quiero comunicar con mis palabras es que vayas a disfrutar de la actividad, que la afrontes como un fin en sí misma, no como un medio —una excusa— para obtener otros resultados —que, como bien apuntas, en el mejor de los casos puede traducirse, precisamente, en eso: un fin en sí misma.
Lo que me resulta «triste» es la visión que tienes del hombre que representa esa idea y que retratas muy bien en tu último párrafo:
Con todo mi cariño y mi respeto, mi mensaje no es sobre ese hombre ni para ese hombre. Mi mensaje es para alguien que quiere ser «íntegro» y, por circunstancias de la vida, no sabe cómo. No para alguien que «por error» encuentra su «vocación» pero en realidad es un atrapado y no tiene intención de «dejar de serlo», ya que busca lo que cree él que es la vía rápida para obtener algo que piensa que va a llenarle: sexo.
No sé si llego a ser entendido, pero mi conversación está en otro contexto. Tu comentario, de nuevo con todo el cariño, está bastante desubicado, ya que estamos apuntando a diferentes tipos de «hombre potencial».
Por descontado que lo que dices tiene muchísimo sentido, pero aplicar mis consejos en un contexto distinto, conlleva a discrepancias y error —obvio—. Es lo que tiene mezclar churras con merinas. 😉
En cualquier caso, gracias por tu aportación y por permitirme aclarar otros puntos de vista tan válidos como el tuyo, David.
samiel dice
Acertadas palabras, yo tenia Estas ideas y la falta de informacion pronvocaro, que mi barco navegara en aguas bajas y me estacara, en la zona comoda. Y mi ser interior se revelava y me parti en ideas contaminadas que me hacia no mover el culo en no tomar accion. Y los matices se me pusiero negros y blancos cuando yo veia muchos colores y todo se numblaba en cuanto queria realizar un cambio y no encontraba el sentido el timon del barco atascado en la comodida. Y agradesco tu espiritud de ayuda de humanidad por que ha veces no sabemos que hacer, y necesitamos ayuda y la ignoracia nos hace ser viles y que gracias a tu proyecto le encuentro sentido a la vida.