Y en esta ocasión os voy a hablar de la confianza integral: cómo desarrollarla.

Existen dos tipos de confianza

Está la confianza situacional o circunstancial y la confianza integral. ¿Me captas? Probablemente no. Te explico…

• La confianza situacional o circunstancial…

Es la confianza dependiente de cosas, digamos, ajenas, como pueda ser: dinero,  bienes, estatus, fama, validación social. Cuando tu confianza es dependiente de cosas que no están dentro de ti —confianza situacional— estás prácticamente vendido, estás expuesto. Esa confianza va a durar lo que duren esas cosas que tienes. Y créeme que pueden desaparecer de la noche a la mañana.

• Sin embargo la confianza integral es…

Aquella que nace en tu interior. Es aquella que, independientemente de lo que tengas o no, te hace sentirte confiado.

¡Mola, ¿eh? la confianza integral!

Ahora dirás: —¡Ostras, yo quiero de eso!

Está claro que lo otro puede venir muy bien pero es ideal conseguirlo a través de la confianza integral, porque la confianza integral te va a permitir acceder no de manera ajena o porque te toque la lotería o porque un día subas un vídeo a youtube y tenga cincuenta millones de visitas y de repente genere fama, porque todo eso, igual que sube, baja. Sin embargo, si depende de tu confianza integral, de tu día a día, de tu esfuerzo personal, de tu crecimiento, va a ser algo que va a ir contigo a todos lados independientemente de que tu coche sea mejor o peor, tengas más o menos dinero en el banco o tu casa sea más o menos atractiva o la gente te admire más o menos.

¿Cómo desarrollamos esa confianza integral?

Yo te voy a dar un par de consejos que si tienes el coraje de poner en práctica podrás disfrutar de esos resultados. El primero de ellos yo lo resumo en una frase:

«Por ti que no quede»

¿Qué significa?

El no ya lo tienes. En muchas casos no hacemos las cosas porque tenemos miedo al rechazo, porque pensamos que va a salir mal, porque en nuestra imaginación hemos decidido que lo vamos a hacer mal. Y sí, en muchos casos, cuando lo tratemos de hacer con ese pensamiento en la cabeza, va a salir mal. A veces nos sorprenderemos viendo que no sale mal, pero en realidad cuando vas con la intención de hacer algo mal es muy fácil que sencillamente lo hagas mal porque ya vas, digamos, derrotado. Ya vas pensando: —¡Uf! La voy a cagar.

¡Pero, aún así, ve!

¡Ve a por ello! Todas las oportunidades que tengas aprovéchalas. ¿Por qué? Vale, puede que vayas 100 veces a hacer una cosa, 100 veces a aproximarte a una mujer, e intentar abrir y te lleves 99 rechazazos de p*ta madre. Muy bien, ¿qué va a pasar ahí? Que puede que de esos 99, el número 10o ó el número 2 ó el número 30, da igual, uno de ellos puede ser una chica que no te rechace, que se interese por ti y que aporte en tu vida. Tarde o temprano va a pasar porque vas a mejorar tú a la hora de hacer las aproximaciones y porque todas las mujeres no son iguales y todas no tienen por qué tener los mismos problemas ni las mismas inquietudes.

¿Entonces merece la pena intentarlo 100 veces si te llevas 99 rechazos y uno de ellos puede cambiar bastante tu vida porque puedes tener una persona que te aporte y que te haga ver la vida de otra manera? Yo, personalmente, pienso que sí. No obstante yo pienso que vas a tener muchas más oportunidades que una.

Y por otro lado, ese intentarlo e intentarlo una y otra vez, ya de por sí, te está forjando. Está haciéndote demostrarte a ti mismo —a tu subconsciente— que eres una persona con coraje. Que es lo que os he comentado antes. Tienes el coraje de tomar las riendas de tu vida, tú mismo, y no dejar que te lleve la inercia.

Y el otro consejo es que no te avergüences de ser quien eres, que sigas siendo tú mismo, por así decirlo y trates de encontrar tu mejor versión.

«Sé tu (mejor) mismo»

Es decir, no te quedes, si eres un friqui de la muerte que te gusta hacer videoblogs, hablar de seducción en Youtube  y este tipo de cosas, pues trata de hacerlo porque te gusta, de crecer y de hacerlo lo mejor posible cada vez. Trata de exprimirte al máximo. Y a esa gente que te critica, que pueda pensar que estás loco: —¿Qué haces?—, —¡Qué valor tienes!—, etc. La gente que te critica pero destructivamente o que no tiene nada de aportar sino que lo que está intentando es frenarte, lastrarte, esa gente… Ni caso.

¿Te gusta? ¿Es tu pasión? Como si te gusta coleccionar mariposas. Si es tu pasión, ¡adelante! Disfrútala, sácale lo mejor. Sácale el partido que puedas, las mayores sinergias posibles.

Y va a pasar una cosa muy bonita: porque por un lado, la gente que te critica destructivamente o que trata de frenarte o que intenta disuadirte de tu sueño va a acabar diluyéndose, va a acabar desapareciendo porque van a ver que se aburren, que no consiguen nada. Mientras consigan algo estarán ahí, pero cuando vean que no, que eres serio, que eres determinante, que vas a por tus sueños, se irán difuminando. Y por el contrario aparecerá gente que te verá, te respetará, te admirará y querrán ir contigo, ayudarte y seguir su camino junto a ti. Habrá un cambio espectacular.

Espero que te haya gustado esta FAQ otra vez… Y, lo dicho, una y otra vez…

¡Fundamental! No me cansaré de decirlo…

No olvides ¡¡¡AVENizarte y superMAXVACUARizarte!!!