Ya no recuerdo por qué, pero ahí estábamos. Era en un pueblo a las afueras, cerca de Valencia. Mi amigo Marquitos y yo, que solíamos dedicarnos más a crear ideas locas, hacer combates de taekwondo o improvisar alguna canción, nos encontrábamos ¿dentro de una discoteca?
Ya te digo, no me preguntes qué demonios hacíamos allí, ya que nos encantaba la naturaleza y no un antro oscuro donde la música te impedía, no sólo comunicarte, sino estar a gusto.
Y me dirás, Ray, pareces un abuelo contándole batallitas a tus nietos.
Y ahora que lo mencionas, casi podría decirte que me siento así, jejeje.
Pero lo sorprendente de todo es que, a pesar de haber pasado más de 20 años de aquello y no acordarme de prácticamente nada —no recuerdo ni el pueblo, ni la discoteca, ni si íbamos con alguien más, que seguro que debía de ser así porque allí (ya te digo yo) no pintábamos nada Marquitos y yo—, hubo una situación que no olvidaré jamás…
Para ponerte en situación, estábamos en nuestra adolescencia. Por alguna extraña razón que no sabes cuánto me sorprende, nos encontrábamos en un super antro de fiesta. La cosa era que importaba poco. Aunque no bebíamos, ni nos drogábamos, ni hacíamos todas esas cosas que hacían nuestros semejantes, nosotros éramos capaces de pasarlo genial haciendo bailes «marciales» o improvisando juegos estrambóticos. Cualquier cosa con tal de no sentirnos como en realidad estábamos: en una prisión.
Como digo, la noche iba genial —aunque no la recuerdo— a pesar de estar «encerrados». Pero… ¿Qué es lo único que recuerdo?
Recuerdo un cruce de miradas. Una niña preciosa que me mantuvo la mirada por unos instantes. No le di importancia.
Tengo que puntualizar que yo no he sido siempre un experto en dinámicas sociales. Por aquel entonces era muy feliz dejando crecer libre mi creatividad y «disfrutando del momento presente». Algo que, de alguna manera, he tenido que aprender a recuperar —pero ésa es otra historia. 😉
Como decía, no le di importancia. Lo que también recuerdo es volver a verla en unas pocas ocasiones más con un par de personas a su alrededor. No me preguntes si eran chicas, chicos o mixto. No lo recuerdo.
Lo que sí que recuerdo CON GRAN ANGUSTIA fue lo siguiente:
Marquitos: —Oye, esa chica que no para de mirar es muy bonita, ¿te has fijado?— Era raro que él dijera algo así, la verdad es que éramos tan friquis que no reparábamos en esas cosas.
Ray: —¿Que no para de mirar?— Dije expresando que estaba exagerando —La verdad es que, curiosamente, lo he hecho.
Marquitos: —Normal, yo creo que lleva ya un buen rato tratando de no pasar desapercibida.
Ray: —¿Qué quieres decir?
Marquitos: —Pues que me da la sensación de que quiere conocerte.
Ray: —Bobadas…
Y desvié la conversación tan rápido como pude.
Obviamente, esa conversación me condicionó y empecé a prestar más atención a lo que hacía ella, hasta el punto en que empecé a creer que tenía razón.
La cosa es que pasaron las horas y la discoteca ya estaba prácticamente vacía. Tenía pinta de que iban a cerrar en cualquier momento.
Entonces, y sin mucha explicación razonable, los dos acompañantes de la bella muchacha, se fueron dejándola sola. No tenía mucho sentido dejar a una chica tan atractiva, sola en una discoteca a punto de cerrar.
Marquitos: —Tío, ahora ya está más que claro.
Ray: —¿El qué?
Marquitos: —Que quiere conocerte.
Ray: —¿Pero qué dices?
Marquitos: —Macho, no para de mirar y ha dejado que se vayan sus amigos quedándose sola. ¿Es que no lo ves?
Era francamente difícil refutar tal argumento, además de que Marquitos solía acertar cada vez que afirmaba algo con tanta certeza.
No dije nada. Esta vez, creo que mi subconsciente pensó que más que excusarse, lo mejor era «hacerse el sueco».
Para ponerte en contexto: La chica me parecía muy bonita y, evidentemente, me hubiera gustado conocerla —y no sólo eso, tú ya me entiendes, jejeje.
La verdad es que no tenía ningún sentimiento enfrentado, sencillamente «no quería creer» lo evidente. Pero yo estaba muy tranquilo. A fin de cuentas ella estaba allí, lejos, a 20 metros, sola, apoyada en la pared, esperado… Sin hacer ningún ademán de venir a acercarse. Tan sólo eso: esperando.
Entonces, Marquitos me cogió fuertemente del brazo y arrastrándome hacia ella me dijo:
Marquitos: —¡Va, tío! ¡Habla con ella!
Ray: —¡¿PERO QUÉ COÑO HACES?!— Dije gritando con tal fuerza que se me oyó por encima de la música. A la vez que me zafaba de Marquitos con un empujón/golpe.
Marquitos: —…— Se quedó mudo y extrañado.
Yo, en ese momento, me había muerto de miedo. Mi corazón quería salirse de mi pecho y, como si mi supervivencia dependiese de ello, le mantenía la mirada fija a Marquitos transmitiéndole que si volvía a intentar algo así, lo mataría.
Tras unos instantes en esa tensión, volví a mirar a la chica y ya no estaba. La busqué con la mirada por todos lados y no la encontré. Mi sistema de supervivencia, automáticamente, se desactivó. Ya volvía a estar tranquilo.
Sin embargo, había sido una situación muy, muy incómoda. Diría más: horrible —probablemente la única vez en la que me había enfrentado de esa manera a nadie. Mucho menos a mi mejor amigo: Marquitos.
Nunca más volvimos a hablar de aquel momento, como si nunca hubiera pasado, pero dentro de mí algo desconocido había surgido.
Ésa fue la primera vez que descubrí mi mayor miedo: ir a conocer a una chica.
No, por aquel entonces no lo superé. Me quedé con la sensación amarga por mucho tiempo. Y tengo más anécdotas posteriores que te contaré en otros artículos, pero antes quiero saber de ti.
¿Y tú, tienes alguna anécdota similar? Estoy deseando escucharla. ¡Anímate!
Alejandro dice
Bueno yo en mi ultimo año en el secundario tuve una compañera en el colegio ,de la cual yo nunca me habia fijado en ella y sinceramente no se por que, ya que era la mas linda de todo mi grado y sin embargo a mediados de Abril ,la mire riendose con sus amigas por mas de 3 segundos y me parecio una muy linda chica y me empezo a gustar y la obserbava 2 0 3 veces por dia (disimuladamente claro esta)sin ir a hablarle ,ya que yo era el mas timido de todo el grado(ademas de ser el chico que mas bromas pesadas le hacian ) y tenia mi grupo de amigos (al cual por supuesto jamas le conte que ella me gustaba) y ella el suyo.
Pero a las 2 semanas ella se dio cuenta que yo la observaba de vez en cuando y me devolvio la mirada ,mirandome mas tiempo de lo normal y desde ese momento se produjo un cruce de miradas constante todos los dias . Yo estaba re contento la chica mas linda del grado posiblemente gustaba de mi ( ademas ella nunca tuvo novio y era la unica que iba a los boliches a bailar sin besarse a ningun chico) pero yo nunca termine de creermela ,yo empeze a tirarme abajo diciendo que si yo le hablara no tendriamos nada en comun ,que ella era demasiada linda para mi ,que ella capaz me miraba porque se sentia observada y no porque yo le gustara , y entonces no le hable ya mitad de año empeze a dejar de mirarla (o por lo menos intentarlo) pero a pesar de que ya no la miraba (tanto) ella me buscaba mi mirada ,a tal punto que cuando yo me daba vuelta a verla tan solo un segundo veia que ella me miraba a mi ,hasta sonriente ,y yo aun asi ,no me la creia y no le hablaba.
Conclusion al finalizar el colegio ,el ultimo dia de colegio ,el de la entrega de medallas ,ese dia me dije a mi mismo que le iba a hablar para decirle que queria conocerla o por lo menos ir a caminar algun dia ,ya que desde ahora mis compañeros no iban a estar mas en mi vida y en la de ella ,podria estar con ella sin culpa (ya se que es muy ridiculo lo que esty escribiendo pero tenia muy baja autoestima en esa epoca) ,a lo lejos la veo mirandome sonriente como si estuviera feliz de verme ,pero no me acerco a ella ya que estaba con sus amigas (y sabia que les cai mal) ,me dije que le hablaria mas adelante ,asi que los pospuse ,luego de la entrega de medallas ya cuando todos nos sacamos las fotos del recuerdo ,ella despues de sacarse fotos con todos (menos conmigo porsupuesto) estaba sola y era el momento perfecto ,pero me acobarde y segui sacandome fotos con compañeros que en el fondo ni siquiera los queria como excusa para no ir a hablarle ,pero finalmente cuando el valor me llego por fin para ir a hablarle ,ella se habia ido ,fue la primera en irse de todos. Habia perdido mi opórtunidad de hablarle porque no tuve LOS HUEVOS de hacerlo. A la semana la busco por facebook (tampoco me animaba a hablarle por facebook jajaja) y veo que me elimino de sus amigos.
En fin la moraleja es : Nunca dudes de vos mismo ,no permitas que lo que piensen otros te afecte y si pensas que la persona que te gusta pueda llegar a gustar de vos , no lo dudes HABLALE ,de ultima si te rechaza no vas a quedarte con la duda de QUE HUBIESE PASADO SI YO HUBIESE HECHO TAL COSA?? y te vas a sentir como un HOMBRE DE VERDAD .Todo lo que conte es 100 % verdad y sufri mucho ,incluso a medida que pasa el tiempo ,pienso lo tonto que fui pero si le veo lo positivo a todo esto fue que desde ese momento me prometí a mi mismo que nunca desperdiciaria una oportunidad por mas minima que sea, de hablar con alguien que me apetece y de ahi los conozco a ustedes tanto Mario Luna como Ray Havana ,gracias a ustedes soy una persona 100 % segura de mi misma y no queria perder la oportunidad de contar mi historia y agradecerles por el profundo cambio que influenciaron en mi ,GRACCIAASSSS 😀
Ray Havana dice
Alejandro, mi enhorabuena por el gran cambio.
Mucha gente prefiere huir y huir, cada vez, de las cosas que más daño les provoca —yo he estado ahí— y lo que no se dan cuenta es que tarde o temprano, la vida te pondrá de nuevo en el mismo sitio para comprobar si has progresado o si todavía tienes que superarte.
En mi humilde opinión, tenemos que ser conscientes de qué son aquellas cosas que más nos duelen o nos afectan, preguntarnos por qué y emprender acción para solucionar esa situación. De esa manera, no sólo nos sentiremos muy orgullosos de nosotros mismos, sino que abriremos una dimensión completamente distinta y mucho más prometedora de nuestra nueva realidad.
Gracias a ti por tu aportación y por inspirarnos al compartir tu historia.
Pablo Sanchez dice
Hermano me paso exactamente lo mismo que a ti ahora que ya no soy un frusco tengo 16 años me paso el año pasado incluso le escribi una carta que payaso era pero nunca se la entrege me quede con un agobio al final incluso hasta ahora tengo esa carta esta tipa me miraba mucho parecia blancanieves ajam se me sale lo frusco , tienes razon simplemente TOMAR ACCION gracias y es horrible ese sentimiento gracias por compartir tu historia
Rafael Guzman dice
Saludos desde Mexico Ray, mi nombre es Rafael, y debo decir que me siento identificado con varias cosas de tu relato, yo soy alguien un tanto «friki» y a la hora de relacionarme con mujeres, tiendo a fallar, y todo por no creer, no recuerdo algun momento fuerte, mas que en varias ocasiones me han dicho que esoty guapo o que basicamente no me quitan la vista de encima, hasta hace poco una amiga de mucho tiempo me digo que siempre le pareci atractivo, y que le llegue a gustar, y de hecho ella me gustaba a mi, alfinal me doy cuenta que mi problema se basa en no creer… Bueno eso ha sido algo como mi experiencia en general a la hora de relacionarme con mujeres.
Un saludo Ray.
Ray Havana dice
Hola Rafael,
La realidad es que, en mi experiencia, no es tan importante lo que nos dicen los demás sino lo que creemos de nosotros mismos. Yo mismamente he sido un claro ejemplo de ello. En incontables ocasiones me han dicho que soy alguien que marca la diferencia y que aporta a la vida de los demás, sin embargo, no fue hasta que decidí creen en mí mismo y caminar esa senda, que empecé a obtener mejores resultados gracias a esa actitud ganadora.
Mi consejo es que empieces a conocerte mejor y aprendas a valorarte. El feedback de los demás es algo genial, pero sin una base en la que apoyarse, se derramará entre tus dedos de la misma manera que sucede cuando intentas mantener agua entre tus manos.
Mucho ánimo y gracias por tu aporte. Para mí es muy inspirador.
Juanma dice
Mi historia más traumática por decir algo no fue así aunque reconozco que también ha habido momentos en el que he sentido esa ansiedad, por lo general yo soy el típico que se hace el ánimo y las saca a bailar normalmente les cojo de la mano y les digo que si se dan permiso para bailar conmigo la mayoría de las veces aceptan.
Tengo que destacar que aunque mi fuerte es la bachata, y para bailarla se necesita un mínimo de contacto físico aquí ya mi cuerpo se pone en modo supervivencia extrema cuando es la chica la que se apreta más de lo que yo estoy acostumbrando y empiezo a creer que es posible que le guste un poquito.
No es tan alto el nerviosismo que siento cuando les cojo de la mano y les invito a bailar conmigo que cuando veo que la chica esta agustito y aunque se acabe la canción tengamos ganas de más.
Te aclaro que a mi me va el riesgo de hecho soy aficionado a los toros y de vez en cuando salgo a la arena y los quiebro o simplemente juego con ellos pero no dejo que me pillen obviamente porque me podrían matar fácilmente, dicho esto me frustró mucho cuando siento la misma intimidación delante de las chicas, cuando se que ellas no significan un peligro de muerte, me las trabajo y camelo y luego no dejo que se me beneficien.
Hazte una idea del cachondeo que llevo con mis amigos de toda la vida la mayoría de veces son ellos o ellas las que me dicen que las tengo en el bote y yo no me lo creo por eso entiendo que soy único en dejar las cosas a medias y no se exactamente porque tengo el radar de Ibis averiado.
Ray Havana dice
Juanma,
Tu historia es muy peculiar. Lo que a ti te pasa es que tienes miedo a ganar. Esto es algo mucho más común de lo que muchos creemos. La mayoría de nosotros preferimos evitar el fracaso a perseguir el éxito. Es una cuestión de genética. El programa genético que llevamos está adaptado a un entorno —paleolítico— donde el riesgo de fallar supone la muerte, mientras que el beneficio de ganar —comer, beber, reproducirse, etc.—, difícilmente compensa.
Hoy en día ha cambiado tanto el medio —cultura— que eso ya no es así. Sin embargo nuestra programación genética viene de serie y es nuestra responsabilidad, cogerla por los cuernos —como es tu caso— y reprogramarla para que nos ayude en vez de boicotearnos.
Por otro lado, tu instinto «cazador» —ganador, diría yo— te ha permitido superar un miedo real: lidiar toros. Si has sido capaz de semejante hazaña —locura, diría yo— debes entender que, como bien apuntas, con las mujeres tu vida no corre ningún riesgo, sólo tu autoestima. Así que te recomiendo que empieces a trabajar en ella porque es algo «ridículo» lo que te está prohibiendo ser mucho más feliz. ¡Aprende a exponer tu ego!
Excelente aporte, Juanma. ¡Gracias por compartirlo!
Evild dice
Hola ray. Mi mirada se encontro con la de margarita y me enamore al instante, senti esa delicia hecizada que tedeja sin aliento,no se como sucedio y ya estabamos charlado y le daba toda mi antencion, y me sentia muy bien a su lado, personalisamos un año y yo hacia kino accidental, y no escalaba, margarita estaba casada con un viejito, y mi amigo de 13 años que cuidaba asu hijo de 7 años, ella se me insinuaba y yo ni idea, incluso hay a veces que dudaba de mi virilidad, era dias tristes y muy poquita alegria, empece a sentirme mal, me estanque. Hasta que en una ocasio llegue a su casa y no habia nadie la busque en el jardin donde platicabamos y se me ocurrio ir al baño?…y… el aliento se me fue y senti como los pies me temblaro y mis ojos no daba credito a lo que veia mis ojos cafes,estaba con mi amigo de 13 años bañadose y acariciadose con gran placer. Me fui de ahi enojadisimo sin sentido me dio tanta rabia tenia la edad de 25años. No dije nada me senti tan impontente y asi estuve hundido en la mierda haciendome pajas ardiendo en celos sin saber sin comprender. Hasta que encontre en internet sexcode no le entedi nada y lo volvi a leer y fue como conoci a mario luna y despues a pool casanova y despues ati y hoy tengo 45años y estoy a gusto por que en aprendido aser social y me cuesta sexualisar y me atrevo y me hace sentir bien y sigo aprendiendo aunque el tren ya se me paso ja ja ja. Gracias ray
Ray Havana dice
Evild,
Nunca es tarde para vivir una segunda oportunidad. Gracias por compartir tu emotiva experiencia y espero que sigas aprendiendo y mejorando para ser más feliz.
Maxi dice
Hola buenas tardes soy Maxi de Argentina, les comento que aquí es muy difícil ganarse una mujer (ial menos para mí) igualmente coincido con el muchacho que nunca es tarde para vivir y sentir tengo 30 años y también desperdicio y desperdicie de salir con compañeros de la facultad por sentirme menos que todos por qué no reuno las cualidades de hombre y la menos creo que me lo hacen notar, todavía estoy transitando este tema y no sé si pueda ser muy social de aquí en adelante. Estoy leyendo un libro de autoayuda que se llama: el poder de la esperanza secretos del bienestar emocional. Dejo saludos y éxitos con las mujeres al resto del blog y gracias Ray! Saludos
Edu de la Fuente dice
Recuerdo aquella vez que en un campamento fuimos a la habitación de una chica ella y yo solos con la excusa de seguir jugando a las cartas, la cosa había ido bien, nos estábamos riendo bastante.
Yo estaba loquito por que pasara todo pero por alguna razón, cuando ella, al entrar en la habitación, apagó la luz, antes de que pudiera razonarlo, yo la encendí movido por una especie de reflejo involuntario. Inmediatamente, tanto yo por dentro a mí mismo como su cara, dijimos «¿pero qué coño acabas de hacer?». Ella no se lo podía creer ni yo tampoco.
Por supuesto, no lo verbalizamos. Acabamos jugando a las cartas durante unos 5 minutos y me fui a dormir a mi habitación derrotado.
El resto del campamento prácticamente sólo nos dijimos hola al pasar. Ella había perdido todo el interés en mí y yo me sentía humillado por mí mismo.
Afortunadamente mi éxito con las mujeres ha cambiado mucho desde entonces, especialmente de dos años a esta parte gracias a gente como tú y Mario.
Edu de la Fuente dice
Por supuesto, donde dice «un reflejo involuntario» léase «un acojone total por parte de mi subconsciente».
Rodolfo Ontiberos dice
Al leer las experiencias aquí relatadas, me gustaría comentar que el sentimiento paralizante es aterrador, me queda claro que tiene que ver mas con lo que creemos que con la realidad, el problema mio ha sido las ideas que se han insertado en mi mente durante toda mi vida, nunca nadie me ha dicho que soy guapo, por ejemplo, mas bien me han dicho lo contrario que estoy muy feo, mi madre siempre me enseño a ser caballero, dejar el asiento en el autobús, no ser grosero, ser muy atento servicial, etc., y estas creencias en el momento de querer abordar a una chica para solo salir a bailar, te paralizan, recuerdo que en las primeras veces en que iba a las discotecas pasaba horas mentalizandome para ir a sacar a bailar a la chica que me gustaba, y cuando me armaba de valor, llegaba otro y la sacaba a bailar, entonces lo que hacia era girar al rededor de la pista de baile buscando a alguien que fuera mas feo que yo y que estuviera bailando, eso me daba cierta motivación, entonces la chica regresaba a su lugar y sentía otra vez la paralización en mi cuerpo, mi mente nuevamente se empezaba hacer ideas de rechazo, mis manos comenzaban a sudar, el estrés recorría todo mi cuerpo, y una vez mas alguien mas la llevaba a bailar, y me decía a mi mismo, vamos solo es un baile, ella a salido a bailar con otros tu también puedes hacerlo, si el otro chico pudo tú también puedes hacerlo, y mas cosas que me decía sin embargo por mas que me daba auto sugestión, nunca fui a sacarla a bailar y me quede sentado solo mirando, en realidad nunca he sentido, ni sabido telegrafiar a las mujeres, saber si están dispuestas o no, se a través de los vídeos que exponen que debo ser ganador, solo que nunca he ganado en eso, por eso no se como se siente hacerlo y anotar gol.
Ray Havana dice
Rodolfo,
A veces es mejor marcarse metas menos «ambiciosas» para ir «de a poco». En lugar de sacarla a bailar, acercarte y saludarla simplemente. O mirarla de lejos y sonreírle cuando se crucen vuestras miradas.
Puede parecer poca cosa, pero eso es porque te comparas con los otros que la sacan a bailar y, aunque los consideres menos atractivos físicamente que tú, en realidad son más atractivos puesto que tienen más confianza en sí mismos.
El físico no es la más importante en un hombre. Importa, pero importa más su personalidad. 😉
Juan Camilo Velasquez Miranda dice
me siento identificado me he perdido de mucho por no saber como llevar la interaccion el no saber que hacer en esos casos, que a uno se la ponen como tan obvio, pero he desidido cambiar eso el miedo que a veces uno siente es mucho, y es como si se paralizara uno cuando ve a esa chica que uno quisiera conquistar,hay veces en que uno no se la cree y… acto seguido la embarra. me da miedo conocerlas y mas miedo aun que me bateen. jajaja
Juan dice
Hola ray y todos los que me lee quiero contarles o dejar aquí una historia bastante graciosa jajaja pero bueno en su momento me provoco mucho enojo sinceramente bueno empiezo era una tarde y yo y mi amigo alan (mi mejor amigoxD) le dije que si se animaba a ir a sargear entonces fuimos a una pequeña plaza y estábamos buscando varios objetivos parece raro pero no encontrábamos nada entonces nos sentamos y yo saque uno de mis libros jaja sobre seducción lo cual siento que esta mal pero bueno lo hice y me puse a leerlo mientras mi amigo simplemente buscaba por que el decía que esto no servia que simplemente hay que hablarles y ya bueno mi amigo no tiene mucha experiencia ni tampoco es un profesional pero pues a tenido mas experiencia que yo pero ambos somos muy pero muy frikis y ambos hemos tenido muchos problemas con ellas en fin la cuestión es que se sentaron dos chicas muy bonitas a lado de nuestros asientos y alan me dijo mira ahí hay unas vamos y yo me empece a poner nervioso y con mucha ansiedad en fin después de eso alan también se empezó a poner medio nervioso y bueno me dijo vamos ya que si no me pondré mas y le dije bueno ve tu yo aquí te espero mientras leía el libro de seducción que había llevado jajajaja me muero de la risa mientras escribo esto bueno alan fue a donde estaban ellas sentadas y se sentó a hablar con ellas y aunque es muy tonto hablando con ellas por o menos le hablo después paso algo gracioso un guardia de seguridad me dijo oye tu amiguito es un ligon he y yo me quede sorprendido y con gracia respondiendo jaja yo le enseñe hablando por puro ego jajaja en fin la cuestión es que me di cuenta de que las personas de alrededor ya habían notado que queríamos ligar con chicas y se nos quedaban mirando extraño guarde mi libro lo mas rápido posible y todos me veían con cara de risa jajaja en fin después de que mi amigo acabara de ligar vino y nos fuimos rápidamente yo muriéndome de los nervios después cunado salimos alan me dijo que ellas le dijeron algo como : y por que no se acerco tu amigo , y ahí me sentí super mal conmigo mismo y me dije es enserio no es posible por que no lo hice mientras mi amigo me dijo que eran bastante mas grandes que nosotros ya que nosotros tenemos 17 años aunque el y parezca un viejo y yo un joven xD en fin ellas tenias 21 y la ora 20 ya eran bastante grandes pero bueno el al menos se acerco y me sentí muy mal después de eso pero bueno aun sigo sintiendo ese miedo y bueno aun no logro eliminarlo por completo ni me he acostumbrado a enfrentarlo pero espero pronto superarlo con practica se que lo lograre , un saludo a todos desde Ciudad de mexico.
José Daniel Flores dice
Anecdotas de como se construyo un gigante!!, yo resumo las mías en dos frases, muy narcisista y muy poco tolerante a la verguenza.
Ray Havana dice
Sé que en los últimos años he cogido algo de peso… pero, ¿tanto como para ser un gigante? 😉
Gerardo dice
A mi me paso en la escuela y en ese tiempo, (bueno tiene como 5 meses) pues hacia afirmaciones magnetices del canal conecta con ella, el lugar donde estaba era el patio principal eran como las 11 de la mañana aquí en México. Es un lugar con muchas jardineras, bueno estaba con una amiga sentados en una jardinera mientras pasábamos el tiempo, me sentía tranquilo disfrutaba de un caluroso día cuando de mi lado izquierdo sale caminando una chica dos grados mayores que yo, bueno estaba a mas o menos 7 metros, pues mientras iba pasando nuestras miradas cruzaron al igual que tu con tu historia por un momento nos quedamos mirando (a pesar de que era una chica atractiva no me sentí intimidado),debido a esto pude sostener la mirada como cualquier cosa debido a mi comportamiento ella fue la que retiro primero la mirada, se sentó 1 jardinera ala izquierda de la que estaba frente a mi, recuerdo que traía un suéter o algo así pues la volví a mirar como apreciando su belleza sin parecer pervertido porque al fin de cuentas estaba disfrutando del día, bueno yo note que ella que ella volteaba a mirarme y se quito el suéter y pues traía como una blusa de mangas largas muy pegada que a decir verdad hacia que su busto se marcara y resaltara pero aun así no me sentía intimidado, después mi amiga se percató de lo que estaba pasando y me dijo parece que le gustas, a decir verdad yo también lo creía consciente mente, bueno no le creía tanto ami amiga así que le dije que me avisara si la chica buscaba mi atención, mi amiga me lo confirmo y me dijo que incluso se me quedaba viendo de una manera como queriéndome seducir jaja, y me dijo pues ve hablar con ella pero en ese instante algo se activo en mi haciéndome preguntas:¿si me acerco que le digo? ¿no la conozco no se ni de que hablar con ella? ¿y si me miraba por que tengo algo ?.
Cosas así finalmente no me acerque y llegaron amigos de ella no me quedo mas que que darme mirando como idiota y reclamarme lo débil que fui en ese instante, y lo sigo siendo por que no me armo de valor para rebasar esa zona de confort jajajaja por eso estoy aquí.
Javier dice
En las fiestas de un pueblo, unos amigos y yo dijimos a tres chicas que se acercaran a sentarse a comer con nosotros, y parecíamos muy animados.
Lo sorprendente fue que acabaron sentándose con nosotros, y nos dio tanto corte que estuvimos prácticamente sin hablar y acabaron marchándose.
Imagino que pensarían: ¡¡¡Vaya fraudes!!! jajaja
Pero lo mejor fue en una ocasión que, harto de tener miedo a acercarme a desconocidas, comencé a pedirles un beso (si sí, directamente cómo se llamaban y si me besaban) y todas me dijeron que no… excepto una, que ni me habló. Le dije: «¿No tienes ni la dignidad de responderme?» y me dijeron sus amigas: «es que no puede hablar que es muda» jajajaja. Y realmente lo era.
Ray Havana dice
Jajajaja
La vida está dispuesta a darte momentos increíbles si sacas el coraje para buscarlos.
Enhorabuena por ese cambio de actitud y paradigma. 😉