—¿Despertar su deseo sexual?— Sé lo que estás pensando: —¿Seguro que es tan fácil?
La respuesta es sí. Sólo deberías revisar tus creencias en caso de que estés convencido de lo contrario. De hecho, deberías entender que la mujer tiene 2 grandes fuerzas totalmente opuestas luchando en su interior.
- Miedo a equivocarse de hombre —sus genes no entienden que existen los anticonceptivos y aún le hacen sentir que si se queda embarazada del hombre equivocado está arriesgando tanto su supervivencia como la del bebé.
- Un deseo sexual reprimido —por el punto anterior— que está deseando explotar; prácticamente incontrolable —la madre naturaleza es así. El sexo es el combustible de la vida… irrefrenable, caótico, impulsivo, arrebatador… Encuentra el interruptor adecuado, actívalo y… ¡BOOM!
Es decir, sólo basta con que ella «sienta» que eres el hombre adecuado para poner rienda suelta a su deseo contigo.
Y ya te veo venir: —Pero Ray, ¿cómo voy a conseguir ser ese hombre único?
¡Pamplinas! La época del príncipe azul —y los cuentos de Disney— ha terminado —o más bien, nunca fue así.
Si bien es cierto que ella va a seguir fantaseando con ello, la realidad funciona de manera bien distinta. Así que, más que tratar de ser el «hombre perfecto» debes de tratar de ser el «hombre oportuno».
Otro tema es si quieres formar algo más duradero con ella, pero… ¿no es un poco pronto para plantearte eso si ni siquiera sabes si sois compatibles en la cama? —Y probablemente en muchas otras facetas…
Por lo tanto, si finalmente decides formar algo más duradero, en mi opinión, «el hombre oportuno» es un requisito indispensable por el que deberás pasar antes… Y si no quedas satisfecho, que te devuelvan el dinero. Ellas lo hacen y bien hecho está.
Dicho esto, a continuación te voy a proporcionar…
5 interruptores que explotarán su deseo sexual
Antes de empezar a enumerarlos me gustaría dejarte claro que cuantos más seas capaz de activar, mayor será la probabilidad de que su deseo sea irrefrenable. Por otro lado, puede darse el caso de que todos los interruptores no funcionen para todas las mujeres —sin embargo, la mayoría sí lo harán.
#1 Permite, motiva y muéstrale que es apta
1. Permite
Digo permite porque en muchas ocasiones estamos tan preocupados por «demostrar» que somos nosotros los que estamos a la altura que olvidamos que ella también tiene y necesita estarlo.
Digamos que tiene que haber momentos para ambas cosas:
- momentos donde toca mostrar tu valía y
- momentos donde ella tiene que mostrar la suya.
No la prives de cualificarse —es decir, de querer impresionarte.
Ésto, además de ser bueno para ella, lo es para ti ya que cada vez que ella trata de mostrate que es mejor, a ti también te «eleva».
2. Motiva
Para incentivar que ella nos muestre sus virtudes, tendremos que hacer un par de cosas.
- Ser capaz de mostrar que eres un hombre con las cualidades adecuadas —Existen un montón de cualidades: atractivo, caballeroso, confiable, generoso…, pero sólo tendrás que ser capaz de mostrar las que ella muestre que necesita a través de su actitud.
- Premiar sólo aquello que haga que la interacción avance —si premias lo opuesto, estarás tirando piedras sobre vuestro tejado.
Como digo en el primer punto, no se trata de ser el hombre perfecto, sino el adecuado/oportuno. Quizá ella esté harta de que los hombres la vean como un objeto, es el momento de mostrarle que no eres un baboso huelebragas y que no la «cosificas». Interésate por su personalidad, por sus logros, por sus pasiones.
Contrariamente, puede que esté harta de conversaciones profundas y lo que necesite sea «ir al grano». En ese caso no seas pedante y dale lo que te está pidiendo a gritos con sus silencios y su mirada.
Como ves, si en este último caso premias una larga conversación… ¡Game over!
3. Muéstrale
Si de cualquier manera ella no trata de cualificarse ante nosotros —esto es mostrarnos las cualidades que la diferencian del resto de mujeres—, será tu tarea mostrarle qué tiene de especial y única para ti.
Para ello haremos explícito en la conversación qué cosas tiene ella que son exóticas o que no encuentras con facilidad en el resto —o, incluso, es la primera vez que encuentras.
Cuidado aquí porque si dices algo poco creíble —o muy común— puede que ella lo interprete como que, en realidad, no tienes mucha experiencia —de lo contrario lo habrías visto en más ocasiones y mencionarías otras cualidades «realmente ocultas»— y vas a perder muchos puntos.
También puedes explotar su curiosidad lanzando ideas inconclusas a cerca de temas que le interesen —especialmente si hablas de ella.
Por ejemplo:
Tú: —No me digas que eres de esas…
Ella: —¿De cuáles?
Tú: —Nada, nada… estaba pensando en voz alta.
Ella: —¡Dímelo!
Tú: —Te lo diré cuando tengamos más confianza— ó —si te portas bien…
En este «combo» no sólo estamos generando curiosidad sino que, además, estás incentivando que se muestre más confiada —se abra— o que colabore —se porte bien.
No te preocupes si un cebo como éste no funciona las 3 ó 4 primeras veces. Conforme vayas añadiendo distintos cebos que vayan minando su indiferencia, tu valor irá subiendo con ellos y su curiosidad también. Constancia y Paciencia. 😉
#2 Efecto bola de nieve
¿Has oído esa estrategia que dice que después de un segundo sí, es más fácil que venga un tercero? Pues así es, y principalmente bebe de la inercia que genera la confianza frente a las buenas experiencias.
¿Te has parado a pensar que al final acabas comprando antes a alguien de confianza que a alguien que quizás tenga un mejor producto pero no conoces?
Y ahora puedo ver a alguno de vosotros diciendo: —¡Nó!— yo siempre sopeso la calidad del producto a las preferencias personales.
Bien, en ese caso, reformulemos la pregunta: —¿Verdad que le comprarías antes a alguien desconocido sabiendo que el producto es bueno que a otro que quizás su producto sea mejor pero la persona que lo fabrica te cae muy mal —es un auténtico /~@#*^»!?
Sí, está más que demostrado que nuestras decisiones son mucho más emocionales que racionales —el consciente procesa un 0,0006% de la información (razocinio) frente al subconsciente que procesa el 99,9994% (emoción).
Por lo tanto, conseguiremos cosas más grandes cuanto más seamos capaces de generar una inercia positiva.
¿Has oído la expresión: «le das la mano y te coge el brazo»?
Pues bien, la idea es ir haciendo pequeños requerimientos como son pedir pequeños favores —cosas sutiles y fáciles de ejecutar: «me acercas eso», «me dices aquello», etc.— para ir poco a poco —gradualmente— subiendo el umbral de demanda de manera que se llegue a un nivel elevado de inversión por parte de la otra persona sin que ésta sea consciente del proceso.
Una vez has llegado a ese nivel, además, su lógica retroactiva estará favoreciendo el efecto bola de nieve en vuestra inversión.
Ejemplo: —como he hecho X, Y y Z, ¿cómo no voy a hacer R?.
#3 Adelántate a sus objeciones
Puede que para este punto necesites más experiencia, pero bajo mi punto de vista te sorprendería ver la cantidad de patrones que se repiten constantemente.
Básicamente es como si estuviéramos, de alguna forma, cortados todos por el mismo patrón. Por lo que sabes que, antes o después, te vas a encontrar con una reducida gama de objeciones a la hora de que ella desate su deseo sexual contigo.
Lo que al principio parece un enigma imposible de descifrar, con el tiempo se traduce en cosas como:
- Tu ritmo.
- Vas demasiado rápido.
- Vas demasiado despacio.
- Su reputación está en peligro.
- Su Factor Fulana le aletra de que puede parecer fácil.
- Su FF le alerta de que uede parecer poco selectiva.
- No está interesada en ti por diversos motivos.
- Se siente una más.
- Te percibe inalcanzable.
- No confía en ti.
- Percibe que sólo la quieres utilizar.
- Todavía no te ve como su tipo.
- Se percibe por encima de ti.
- Está feliz con su relación actual.
Por lo tanto, si eres capaz de detectar con antelación cuál va a ser el inconveniente, vas a poder prevenirlo y hacer que la inercia anterior no se frene cada vez que su cabecita le haga las preguntas que le hace cada vez que quiere cerciorarse de que no se equivoca.
#4 Inspira
Tu presencia es una de las armas de atracción más poderosas por lo que es capaz de subcomunicar: Admiración.
Esto implica que tu trabajo personal va a incidir exponencialmente en tu capacidad de atracción.
Ten muy presente que ellas son mucho más sensibles a la congruencia: Quién dices ser Vs Quién pareces ser.
Si vas tratando de aparentar alguien que no eres, antes o después, te verán el plumero.
Si cada día, poco a poco, trabajas para mejorar la versión actual de ti mismo, te sorprenderá experimentar lo poquito que necesitas para alcanzar una presencia destacable.
Piénsalo detenidamente: Si mejoras tu presencia —apariencia, comunicación verbal, comunicación no verbal, actitud— un 1% cada día, al cabo de un año habrás mejorado como persona un 3.778%.
—Fórmula: (100 + 1%365) = 3.778,34343329 ¡Impresionante! ¿Verdad?
Imagínate una versión de ti casi 400 veces mejor que tu yo actual. ¿Te imaginas qué cantidad de deseo sexual irrefrenable serías capaz de despertar? ¿Quién podría resistirse a tus encantos?
—¡Hasta yo lo tendría difícil, jejeje!
#5 Entorno nutritivo
Poco hay que añadir en este punto. No se trata ni más ni menos que de congruencia y lo resumiré con una pregunta:
—¿Crees que una versión de ti mismo casi 400 veces más evolucionada iba a seguir rodeada del mismo contexto?
Es decir, si sigues esa maravillosa evolución, tu entorno va a ir evolucionando, de una manera u otra, también.
Bien te encontrarás en lugares distintos y rodeado de personas distintas, bien permanecerán algunos lugares y personas que ya estén actualmente a esa altura, bien se mantendrán aquellos que puedan seguir tu ritmo de evolución contigo.
Por el contrario, si tu entorno no cambia o no crece contigo… ¿seguro que has evolucionado lo que crees?
Es una aberración a la congruencia por lo que ni «cuela» ni ellas se lo van a tragar. Tu cambio interior, indudablemente, va a afectara a tu entorno, a tu mundo exterior.
#6 Bonus: Contacto físico.
Tranquilo, no me voy a explayar aquí ya que, en éste artículo —5 claves para sentirte cómodo e incentivar que toques a una mujer—, tienes más que información suficiente para profundizar.
#7 Bonus: No la cagues.
Y este otro artículo: 5 cosas que haces para espantar a la chica que te atrae sin saberlo (y cómo evitarlas)
Concluyendo
Como puedes ver, es bastante probable que el deseo sexual de las mujeres responda a la mayoría de estos interruptores.
Es evidente que existen muchos más, pero considero que estos 5 (más los bonus) están bastante equilibrados ya que tienen en cuenta tanto a la persona más importante y sobre la que más influencia puedes tener —tú mismo— como a ella —en la medida de lo posible.
Así que, como realmente hay mucho campo de mejora, para que puedas llevarlo a cabo te deseo mucho ánimo, más energía y que tomes excelentes decisiones.
Y tú, ¿qué otro interruptor añadirías o quitarías?
Enrique dice
Me acabas de abrir un mundo con lo de: «Muestra diferentes actitudes según ella lo necesite» , enorme como siempre Ray, un abrazo
Ray Havana dice
Esto no es algo exclusivo de las mujeres, todos lo hacemos… Si sabes leer la comunicación no verbal de cualquiera, puedes saber lo que desea aunque no lo manifieste verbalmente. 😉