Entrega total

Muy Buenas Atractor, bienvenido al capítulo octogésimo noveno.

Vamos a escuchar un resumen de la pregunta que teníamos la semana pasada y vamos a escuchar la respuesta de Jose, luego añadiré algún punto y comentaré un poco su respuesta.

Iremos por la pregunta de la semana que viene, que en este caso es bastante interesante.

Y quiero pues —aún anticipándome un poco— agradecer esa parición, esa valentía también, pero voy a dejar ahí esa incógnita hasta el final.

Venga pues, vamos por la pregunta y respuesta de este capítulo octagésimo noveno, capítulo 89.

Muéstrale el camino

José Rafael:

Para que perciba que hablas su mismo idioma

Muchísimas gracias Atractor, muchísimas gracias Jose Rafael.

Un placerazó tu colaboración, muy interesante y voy a pasar a comentarla un poco por encima y luego a dar una pequeña pincelada para para dar mi aporte.

Bien, por un lado nos comenta que la traduzcas porque —evidentemente traducirla en el sentido de hablar su mismo idioma— ellas se expresan de una manera distinta porque entienden la vida una manera distinta.

Es importante entender ya yéndonos muy a lo bestia, que cada ser humano ve la vida de una manera. Sin embargo, todos en general somos humanos y como humanos tendemos a ver las cosas por patrones, en realidad, aunque somos individuales, cada uno tenemos patrones.

Que podemos generalizar, que todos hacemos, porque todos de una manera andamos sobre dos pies, todos vemos por los ojos en fin, saboreamos, olemos etc. y aunque a uno le puede gustar un olor y a otro otro.

Olemos y el hecho de oler genera comportamientos por los cuales cuando algo te gusta como huele pues lo queréis tener cerca ¿no? por así decirlo y cuando te disgusta lo queréis tener lejos.

Entonces diferimos en qué queremos tener cerca o lejos, pero sabemos que cuando algo nos gusta cómo huele, por así decirlo, nos gusta tenerlo cerca.

Y eso es por así decirlo, general a todas las personas que les guste cómo huele algo.

Por eso somos muy similares, muy parecidos, en lo general y luego ya en lo particular, somos particulares.

Entonces, debido también a nuestra forma de entender el mundo a nivel sexual, de nuestra naturaleza sexual, no es lo mismo ser un hombre y lo que ello conlleva, que ser mujer.

Y es muy sencillo porque siendo mujer, pues el hecho de tener que quedarte embarazada y gestar a un niño durante nueve meses, tener que cuidar de él.

Porque hay una hormona que es las oxitocina, que básicamente te reprograma para que des tu vida por ese bebé y no tanto le sucede al hombre.

Que también le puede suceder pero no a ese nivel, evidentemente, por poner ciertos puntos, ciertos matices para entenderlo.

Evidentemente, nuestra forma de expresarnos, todo esto es para llegar a la conclusión de que nuestra forma de expresarnos en el mundo difiere bastante.

Pero por norma general difiere bastante entre hombres y mujeres.

Ojo, habrán mujeres que se expresen como más masculinas y hombres que se expresen más femeninos, también, siempre hay excepciones.

Pero el término medio en la campana de Gauss, digamos, el grueso de la campana de Gauss, los hombres tienden a ser masculinos y las mujeres tienden ser femeninas.

Esto lo he repetido millones de veces pero no dejo de repetirlo por si algún oyente nuevo llega aquí y no conoce todo lo que digo y puede sacar una mala conclusión de todo esto.

Y que evidentemente su trabajo es escuchar muchos más audios e informarse, pero bueno, ya sabemos que hoy en día si no escuchas las cosas en el momento, la primera idea que te llevas es la que te llevas.

Entonces, básicamente, nos dice Jose Rafael que lo ideal es que aprendas a hablar su idioma, entender cómo ella se expresa y comunicarte con ella.

Para que ella perciba de alguna manera que habla su mismo idioma y que en definitiva la entiendes.

Falta de confianza en ti: falta valor

Eso va a hacer que empiece a confiar en ti, que tú valor aumente, lo que llamamos valores: buenos genes, situación privilegiada y capacidad de protección y asistencia.

Si tú la entiendes, no es que tengas mejores genes, que igual un poquito sí porque tienes los genes capaces de entenderla a ella.

Situación privilegiada en cierta medida, porque también te sitúa en una posición privilegiada de entender a las mujeres.

Pero sobre todo tienes la capacidad de asistirla y protegerla porque sabes cuáles son sus necesidades y eso es un interruptor muy poderoso es uno de los tres interruptores poderosos que hacen que un hombre sea atractivo.

Entonces, si consigues de alguna manera según José Rafael, traducirla, entenderla y hablar en su mismo idioma, ella va a cambiar su percepción sobre ti y de una manera se va a abrir más.

Por otro lado te dice que sí, que no te sientes demasiado, no pierdas, no te quedes pensando tanto en el pez y piensa más en la caña, en la habilidad para atraer y no te sientes solo en esa chica.

Porque incluso si sólo te centras en ella e inviertes demasiados recursos en ella, el árbol no te va a dejar ver el bosque.

Vas a acabar un poco viciado y igual sobre regando una planta cuando lo que necesita quizá es aire, oxígeno y que le dé el sol, pero no necesita más agua y si sigue regándola, pues la ahogas.

Entonces, es importante como él dice que conozcas a otras, que airees, que refresques, que ambientes, que ella también disfrute de la sensación de tu ausencia, de no tenerte, de decir ¿qué pasa con este chico? ¿ahora dónde está? y que te eche de menos.

Puede ser muy bonito para que ella misma te pida que vuelvas.

Y eso igual no se lo estás permitiendo, luego habla del mapa.

El mapa básicamente viene a ser que debido a tu conducta, a como haces las cosas, a tus principios, cómo eres capaz de proyectar tus principios, tus valores, qué es lo que realmente te mueve y qué haces en la vida para que eso se cumpla en tu vida.

Pues eso le va dando a ella señales implícitas, le va dando ideas de cómo quieres vivir, de qué es para ti importante en la vida y si ella —evidentemente pues todo lo anterior se cumple— quiere estar contigo porque se siente comprendida, habla su mismo idioma en fin.

Ella siente que va a estar cobijada contigo y va a sentirse protegida y a gusto, evidentemente va a querer entrar en tus estándares.

Y va a querer formar parte de ese mundo que le estás mostrando y cuyos valores mola mucho y en definitiva son tu mapa, es todo aquello que realmente da sentido a la vida y por lo que luchas y por lo que das la vida en sí mismo.

Entonces, si eres capaz de definir eso y de subcomunicarlo, implícitamente también comunicarlo de vez en cuando explícitamente, pues ella probablemente te va a hablar mucho más y va a querer más formar parte de ello.

Y luego, al principio aquí ya empiezo a pagar mi pequeño granito de arena porque todo esto son apuntes muy interesantes, pero básicamente habla un poquito de que hay una confusión en lo que dices.

Yo evidentemente no veo ninguna confusión lo veo totalmente normal y es que ella tiene un AS, tú sientes que tiene unas emociones, que realmente ella se siente atraída por ti, es algo que tú puedes detectar.

Sin embargo, se resiste a dejarse llevar por ello, supongo que eso es lo que quieres comunicar, yo lo entiendo así, habitual, suele pasar mucho.

Y en este caso esa actitud es muy femenina, es una actitud, que lo cierto es que también lo tienen muchos hombres.

Pero sigue siendo femenino es una actitud de un poquito, de no querer arriesgar —sería la palabra— de preferir malo conocido que bueno por conocer.

La parte masculina es la que se arriesga, es la que busca la lucha, es la que encara la muerte.

De hecho, los deportes de riesgo son muy masculinos, todo tipo de deporte cuanto más agresivo mejor, las películas de guerra en fin.

Estoy estereotipando, lo sé, pero va por ahí los tiros.

Todo lo que enfrenta la muerte, por el placer de vencer a esa muerte y seguir con vida o sea buscamos seguir viviendo pero a través de la muerte, a través del riesgo, todo eso es muy masculino.

La mujer es más la vida, es el círculo. No es la línea recta, el atravesar las cosas, sino que es el mantenerse en un círculo, la luz, el color, la vida. Es la abundancia, es el tener, es el permanecer.

Entonces, no atreverse a dar ese paso y a atravesar ese umbral es muy normal, es un rasgo muy femenino, digamos que es genuinamente femenino.

Y tiene sus momentos, pero lo cierto es que que sea femenino no significa que sea bueno para una persona en general, ni siquiera una mujer.

Yo creo que hay que encontrar —dependiendo el momento— la situación, la persona, hay muchos factores.

Pero hay que encontrar siempre ese equilibrio que no es el punto medio, a veces es: ahora me voy a regocijar en esta situación y otro día puede ser me voy a arriesgar.

U oscilando entre ambos, entonces, todos estos consejos están muy bien, yo sin embargo, les hago mi matiz y supongo que se ve en una forma más vamos a decir madura, por decir algo.

De ver todos esos puntos con respecto a lo que José Rafael había aportado, que era una parte más técnica, por así decirlo.

Claro, todos estos apuntes que nuestro Atractor nos ha aportado y que puedo agradecer desde aquí, porque gracias a ti tenemos una colaboración en el programa de hoy.

Todo esto es muy técnico es muy digamos nivel 2, por así decirlo, es ¿qué puedo hacer para conseguir que ella vuelva a mí?

Piensa en abundancia

La respuesta es perfecta para la pregunta, por así decirlo. Pero yo voy un paso más allá, de hecho, cuando dices piensa en abundancia.

Conoce a otras

Y busca otras chicas y tal.

Define tu Mapa

Define tu mapa y todo eso. Si que te estás un poco desligando de esa pregunta, de ¿qué hago para conseguirla? te estás diciendo ¿a ver? no todo es para esa mujer.

La respuesta es perfecta para la pregunta, por así decirlo. Pero yo voy un paso más allá, de hecho, cuando dices piensa en abundancia— y busca otras chicas y tal y define tu mapa.

Y todo eso si que te estás un poco desligando de esa pregunta, de ¿qué hago para conseguirla? te estás diciendo ¿a ver? no todo es para esa mujer.

Ciertas cosas que hagas puede que vengan muy bien pero tu fin no debería ser conseguirla a ella, porque al final la mujer es la mujer y cualquier otra persona que haya en tu vida —en este caso ella.

Es una forma de autoconocimiento a ti mismo, de expresarte y de a través de ella conocerte, es un medio para conocerte a ti mismo, igual que tú lo eres para ella.

Pero no es un fin, el fin eres tú, el fin tiene que ser uno mismo el fin es conocerte, crecer entregarte, lo que sea, pero al fin de cuentas, tienes el mayor poder posible sobre ti mismo —o debería ser.

¿Confusión?

Entonces, ¿cómo extrapolamos esto? ¿cómo damos un paso más allá y nos centramos en nosotros?

Y teniéndola a ella en cuenta, evidentemente. Por un lado, es bastante normal, como digo, que una mujer se sienta en esa tesitura y por lo que decías: «es que como le han hecho daño pues no se atreve a abrirse».

Tengo que decir que la vida precisamente es eso.

Es decir, lo que yo te recomiendo con ella es que apliques algo que vas a aplicar en tu vida en términos generales por lo menos con la gente que quieras con la gente que puedas ser tú mismo.

Digamos que de alguna manera consideres que no te quieren hacer daño y que si te hacen daño no es porque quieran sino porque hay veces que se hace daño uno mismo.

O sea, te hacen daño porque te quieren, no porque te quieren hacer daño.

Que una persona te quiera no implica que no debe hacer daño, pero por lo menos no es la voluntad de esa persona él o ella lo hace por su bien, por tu bien, pero resulta que a ti te perjudica pero ese es otro tema.

Partimos de la base de que estamos hablando de personas en las cuales confías, que quieren lo mejor para ti.

Pues evidentemente con esas personas te puedes abrir y puedes compartir tu corazón, compartir tu esencia, quién eres tú.

Y en este caso, como norma general te aconsejo que seas así, pero especialmente con gente a la que aprecias, quieres, etc.

Honestidad y Aceptación para que ella se abra

La honestidad es fundamental, ser honestos, no implica por ejemplo decir las cosas de una manera basta, sino con cariño, pero ser sincero.

De alguna manera, decir las cosas desde el corazón y por supuesto comunicarle esa honestidad.

Si ella ve que hablas desde el corazón, ella lo va a percibir.

En el momento que lo percibe, como norma general, en la mayoría de casos —estamos hablando de una persona que te aprecia— también se va a empezar a conectar con su corazón.

Va a empezar a abrirse contigo, va a sentir que puede hablarte a ese nivel porque hablas desde el corazón.

Y yo le comunicaría, le sub comunicaría, comunicar me refiero a hablárselo, decírselo y subcomunicar es que ella lo vea en ti, que tú eres un ejemplo y es la aceptación.

La aceptación implica básicamente que sea la que sea la situación que vaya a suceder, especialmente si no te gusta, la aceptas.

Es decir, vale, esto es lo que hay y a partir de ahí sin resistirte, sin luchar, sin decir ¡esto es lo peor! dices: ¡vale, esto es lo que hay, no me gusta una mierda!.

Vaya caca de situación, pero no me voy a reciclar no voy a decir bueno pues esto es lo que hay, yo he hecho lo que he podido, aquí me quedo.

De acuerdo, esto es lo que hay ahora y a partir de ahora vamos a trabajar en ello. No con fuerza, sino con inteligencia, con pasión, vamos a estar pendientes de ver cómo hacemos para que esto cambie.

Vamos a trabajar poco a poco probando esto, probando aquello y dándonos cuenta que una y otra vez —muy probablemente sí estás en una situación que no te gusta— cambiarla, no sé, algo de la noche a la mañana. Vas a tener que luchar, perseverar.

No quiero usar la palabra luchar, porque parece que vas en contra de la situación, no es inteligente ir en contra de la situación que te está destruyendo.

Porque básicamente entras en su juego —por así decirlo— entonces tienes que buscar otro juego, una especie de jiu-jitsu.

Utilizar esa situación, esa energía para cambiarla poco a poco y reorientarla.

Como hacemos con los embalses de agua que cuando ya están a tope ya no se puede más, pues los abrimos para que esa agua fluya y no se nos inunden.

Para crecer es necesario el dolor

Un poco eso, saber hacer jiu-jitsu con la situación porque para crecer, el dolor es necesario, sin dolor no existe crecimiento.

Cuando estamos creciendo de pequeñitos nos duelen las rodillas, las articulaciones, los dientes, todo lo que está creciendo.

Cuando atraviesas una situación de dolor, ya sea una ruptura con una pareja, una muerte de un familiar, una despedida, lo que sea.

Eso produce dolor, pero ese dolor es necesario para madurar, es necesario para pasar de nivel, para crecer, básicamente.

Superar el sufrimiento

Ahora bien, el sufrimiento es donde realmente vamos a tener que trabajar nosotros, para el dolor no podemos hacer nada, es un dolor y va a estar ahí.

Cuanto se mantenga ese dolor, osea, por cuánto tiempo y la intensidad que vaya subiendo porque si cada vez es peor, es que estamos haciéndolo mal y estamos sufriendo innecesariamente o quizá no igual necesitamos el sufrimiento.

Hay gente que necesita el sufrimiento.

Hay gente que estamos en una situación, que queremos seguir ahí martirizándonos durante más tiempo hasta que llegue un día que digamos. «me he cansado, esto ya no va conmigo, quiero crecer.

En ese momento en el que decides quiero crecer, acepto este dolor pero voy a cambiarlo, es en ese momento cuando empezamos a madurar y a progresar.

Entonces ¿por qué he explicado todo esto? porque ella tiene miedo a eso, a que tú le hagas daño. Yo sería honesto y le diría: «no es mi intención, jamás te haría daño».

Eso no implica que no te lo vaya a hacer, podría hacerte daño. Dios no lo quiera —por utilizar un término, no soy creyente pero bueno— ojalá que no te haga daño.

Pero en cualquier caso, si te hago daño, me gustaría que lo vieras como que primero no lo he hecho a mala fe, no era mi intención hacer daño, jamás lo haría por voluntad.

Y segundo, siempre hay una intención positiva detrás de todo y en este caso si te hago daño quizás es porque hay algo ahí que te está pidiendo crece.

Mi forma de verlo —esto ya es una reflexión personal— es que cada situación de dolor es una oportunidad de crecimiento y no al revés.

Cada vez que fracasas, cada vez que tienes que que cambiar tu vida, no lo sé, que hacer algo distinto, que reinventarte, es una putada.

¡Me cago en la leche con lo bien que estaba! o con lo bien que estaría si X.

Pero lejos de quedarme en el «ojalá fuera así, fuera a sá», prefiero aceptarlo, ser honesto conmigo mismo y decir: ¿esto para qué me sirve? ¿qué saco yo de aquí?

Y eso «qué sacas tú de ahí realmente» es lo que te está haciendo crecer y evolucionar.

Entonces yo le comunicaría eso con palabras parecidas a las que estoy diciendo ahora, le sacaría conversación algún momento en lugar de —como tú dices—, le trato de ignorar, como si no pasara.

Eso a ella no le resuelve la pregunta. Si no le resuelve la pregunta a ella, esa duda que tiene no está resuelta, va a estar siempre ahí.

Esto no significa tampoco que se la vayas a resolver solo con este discurso. Este discurso le va a ayudar y también hay que ver cuando lo sacas.

Yo hablaría, calentaría la conversación, estaría hablando con ella a gusto, entonces ella en el momento que me insinuase que tiene miedo, yo le diría: «te entiendo perfectamente esto es normal».

Le comentaría: es parte de la vida pero quien no arriesga no gana.

La única forma de crecer es a través del dolor, no del sufrimiento, el sufrimiento es más elegido, lo eliges tú.

Sufrir es un poco tener gusto por lo que está pasando.

Siempre podemos hacer algo que de una manera ese dolor lo vaya rebajando es decir que la situación vaya cambiando un poco más rápido.

Entonces, mientras tiene la sensación de control de que de alguna manera estás empezando a cambiar esa situación, pues sea mucho menos nivel de sufrimiento.

Si te quedas estancado en la resignación, evidentemente ese sufrimiento es eterno.

Entonces, básicamente se lo comunicaría de alguna manera con esas palabras o similares, pero sobre todo dejaría que ella viese que soy consecuente con mis palabras, que no sólo son palabras sino que en mi vida lo aplico.

Y ella ve que es así. También voy a llevar desamores y me voy a llevar malos momentos como todo el mundo, solo que los míos .

Y ¿cómo digiero esos momentos? y ¿cómo los llevo adelante? es lo que me hace —por así decirlo— distinto y «un ejemplo a seguir».

En este caso, para que ella diga: ¡ostras es verdad!

Ella realmente confía en que sí, si me haces alguna vez daño no es porque has querido hacerme daño, sino porque por el motivo que fuera tenía que ser así.

Pero no la voluntad, ha sido circunstancial y me lo tengo que tomar de una manera constructiva.

Ese es el punto que quería sobre todo aclarar, a parte de los puntos que nos ha comentado José Rafael, —muy interesantes— y vamos a ir por la pregunta del programa número 90.

Muchísimas gracias Atractora angélica, un placerazo, un saludo allí a Colombia, un saludo a todos, toda la gente colombiana que conozco que es bastante, en mi estancia en Londres hice muchas amistades allí y fueron un un sol.

Un acento que me encanta, vamos a ver si podemos ayudarte esta semana, a ver si se nos animan un poquito más y aportar lo que consideréis que le puede sacar de esta situación a Angélica, que le puede dar un «boost» y le puede ayudar realmente.

Así vamos viendo también de qué manera entendemos la psicología femenina y si sucede como en el programa anterior que había mucho contenido, igual, trato de quedarme con los mejores puntos en fin.

En principio aportad sin miedo y yo me voy organizando y aunque como bien digo, este programa en realidad está enfocado a hombres que quiero —yo personalmente— que entiendan la psicología femenina.

Considero que por mi experiencia y por todos estos años trabajando en este campo puedo hablar sobre el tema.

Aunque también siempre digo —me puedo equivocar— que no os creáis todo lo que yo os diga, que lo viváis vosotros.

Tenéis una referencia —por así decirlo— pero por supuesto es un placerazo para mí que en este caso Angélica, hayas escuchado y te haya encantado y te sientas —no sé— entendida, representada.

Y dices que yo hablo venusiano, gracias por —de alguna manera— confirmarlo.

Porque uno no siempre sabe si lo que dice, al final está bien. Al final —personalmente en mi caso— por lo menos soy más juez yo de mí mismo, que cualquiera lo sea.

Por eso, cuando alguien me pueda criticar, me he criticado yo tanto antes que no me puede ofender.

Personalmente soy muy perfeccionista, cada vez voy tratando de quitarme esa manía, pero al final es bueno, es agradable.

El reconocimiento en este caso y que sin conocer de nada el podcast, lo estás escuchando y digas me ha encantado.

Un placerazo de verdad porque como digo tampoco está enfocado para vosotras, no por nada, no porque no quiera ayudaros que de hecho vamos a hacerlo en el próximo programa.

Sino porque considero que lo más importante es centrarse en una parte en la que mejor se te de —por así decirlo— creo que centrándose en lo que mejor sabes hacer, pues vas a hacer un trabajo mejor.

Eso no quita —evidentemente— que puedas ampliar y puedas ayudar a la otra parte, al 50% restante que no es la primera vez que lo hago, ya hubo un programa donde una chica consultó y respondimos a su pregunta.

Así que nada, encantadísimo de que espacies por aquí, Atractoras y al final de lo que se trata es de que nos entendamos y de que nos unamos.

Y no todo esto que está sucediendo a velocidades de vértigo últimamente, que es que por lo que se promueve. Últimamente la idea es que nos nos dividamos totalmente.

Divide y vencerás, los hombres nos vayamos por un lado y las mujeres por otro.

Los hombres nos volvamos todos gays las mujeres todas lesbianas y así no haya problemas y lo siento mucho pero va a haber siempre problemas en las relaciones.

Me da igual, el sexo que seas, porque un hombre con otro hombre va a tender a haber una polarización, va a haber un hombre que haga el rol masculino y un hombre —el otro— que haga el rol femenino.

En la mujer, idénticamente igual, no sólo tiene que ver con el sexo con el órgano sexual, tiene que ver con la polaridad de la relación.

Para que una relación de atracción se genere, tiene que haber un un polo positivo y un polo negativo.

Yin y yang, un masculino-femenino es así, si no lo hay, no hay una relación de atracción, hay una hermandad, hay un algo pacífico.

Pero desde luego en ambos polos son necesarios y me da igual que se tenga pene o vagina.

Pero no me enredo más vamos a ver qué soluciones le damos a Angélica, muchas gracias por participar y por tus palabras.

Animaos Atractores, si alguna Atractora está por ahí y quiere dejar consejos por supuestísimo también está totalmente invitada.

Esto está muy abierto aunque yo pues me focalice y apunte a donde considero que más puedo aportar.

Mucho ánimo para contestar a esta Atractora, más energía para hacerlo y ya sabéis, independientemente de los resultados que obtengan tras vuestras decisiones en la vida que aunque no lo creáis estáis cada minuto tomando una decisión.

De los resultados saquéis —aunque sean malos— ¡Excelentes conclusiones!