¿Hasta dónde puede llegar tu atractivo si lo cuidas?
- ¿Cómo diste con la atracción?
- ¿Cuándo te convenciste de que era el camino?
- ¿Qué claves aceleraron tu progreso?
- ¿Cómo es tu vida ahora?
Atractor, el Podcast de Referencia en Atracción. Para ti, hombre, que quieres alcanzar tu máximo potencial y ser tu mejor versión, aquella que te hace sentirte realizado al afectar positivamente a la vida de las personas que te rodean, expandiendo a cada paso tu área de influencia.
Los dejo con, Ray Havana.
Loquendo: Muy buenas, Atractor, bienvenido al Podcast Atractor, el Podcast de Referencia en Atracción.
Ray: Muy buenas, Jorge Loquendo, un placer tenerte aquí.
Loquendo: Muy buenas Ray Havana, el gusto es mío.
Ray: Ahhh.
Loquendo: Y un saludo a todos los Atractores.
Ray: Ah, eso, un saludo también a todos los Atractores. Hoy, el Podcast número…
Loquendo: Concretamente el programa 41.
Ray: Y, un podcast que, bueno, no vamos a responder una pregunta, no por falta de preguntas, porque sí estáis haciendo vuestros deberes, muchas gracias, además, nuevas reseñas también, un placerazo, seguid así chicos, esto funciona, pero hoy tenemos otro caso de éxito, y un caso de éxito que personalmente, estoy muy orgulloso, ojo, orgulloso no con respecto a mí, por la ayuda brindada, que bueno, que, que esta muy bien, sino realmente con los resultados, con la trayectoria, pues en este caso de nuestro Atractor Alberto, una persona que se ha reconstruido a sí misma, que se ha transformado, y que bueno, hoy en día, pues esta, bueno, ya llego la temporada, vamos, pero disfrutando de todos esos cambios tan cruciales, en la vida de cualquier, creo yo, Atractor, en este caso hombre, que se prefiere. Lo cierto es que, bueno, contactó conmigo recientemente, pues, para que le ayudara con lo que yo digo un poquito así en ingles se dice peanut, cacahuetes, con minucias, que bueno, para él no lo son, evidentemente, porque es su día a día, y son cosas con las que se esta encontrando, y le están un poco, pues, poniendo a prueba, que al final es de lo que se trata, en mí caso pues ese no es mí dificultad, por así decirlo, pero vamos, lo cierto es que, ha sido tan bonito todo ese progreso y etcétera, que bueno, he querido compartirlo con todos, le comente hoy “eh, tío, ¿esto, qué te parece?”, y la verdad es que tengo que agradécele, pues, su tiempo, además que encima, pues, tuvo que esperar porque se le complico la situación, pero vamos, su tiempo, y, bueno, y este aporte que está haciendo para que veamos que las cosas son posibles, son posibles, y principalmente es posible si tu quieres que sea posible. Así que nada, no me voy a extender mucho más, vamos ya a por este pedazo de entrevista. Adelante.
Ray: Muy buenas, Atractor, ¿qué tal?, ¿cómo estás querido Alberto?
Alberto: Hola ¿qué tal Ray?, un saludo y un saludo también a todos los atractores que nos están escuchando.
Ray: Un saludo para ellos también, por supuesto. Bueno, yo estoy muy contento porque estés tú aquí, puesto que, bueno, tu trayectoria no es de ayer.
Alberto: No.
Ray: De hecho, contactaste otra vez conmigo para solucionar unas cosillas que yo considero menores, pero que juzgaran nuestros oyentes cuando lo escuchen, pero bueno, a mí me gustaría empezar, bueno, agradeciéndote que estés aquí, porque…
Alberto: Un placer, claro.
Ray: …bueno, tu caso de éxito es un caso muy bonito, muy bonito porque es el típico caso de éxito de como diría este hombre, ahora no me sale el nombre para decirles, decía el director de cine este que estoy, son horas, solo le estamos dando unas horas, cuidado, este hombre lleva esperándome unas cuantas horas, es que me he retrasado por circunstancias, ¿cómo se llama? Woody Allen, me ha venido a la mente, Woody Allen decía que “llegue a tener éxito de la noche a la mañana, en 10 años, pues un poquito, lo que pasa es que en ingles queda, sí, al revés, 10 años de la noche a la mañana, entonces, en tu caso efectivamente, pues, más o menos se remonta bastante, bastante tiempo, y es un caso, pues, modelo, en el sentido de una persona que decide coger las riendas de su vida, y pasito a pasito, y cavando, y cavando piedra, y mejorando, bueno…
Alberto: Poco a poco, poco a poco, efectivamente.
Ray: Y sin prisa, pero sin pausa, pero bueno, llega a una situación que…
Alberto: Y empezando de muy abajo, y llegando, yo me considero, vamos, no te voy a decir que este muy arriba, puedo subir más, pero estoy más que satisfecho, con mis resultados y con mí vida actual, y para mí eso es lo que cuenta.
Ray: Correcto, y ahí yo estoy personalmente, en algunos campos tengo que confesar que te envidio. Pero, antes de llegar a ese punto climático, vamos a empezar por los principios, yo se que una persona, bueno, yo se que hay mucha gente que estará en tu lugar entonces, de que quiere resultados, de que quiere conocer chicas, quiere mejorar su vida, tener más éxito con las mujeres y, en mucho de los ámbitos, pero sobre todo, hay que cosas que hay que empezar a “divide y vencerás”, vas a empezar por un apartado y ver cómo hago para estar con las chicas un poco mejor, y bueno, sencillamente no sabes por donde empezar, y entonces empiezas, supongo que, a buscar cosas, ¿qué te encontraste cuando estabas en esa situación?, ¿cuál era tu mentalidad, un poco…?
Alberto: A ver, yo de siempre, te puedo decir que lo único digamos bueno, que yo tenía con respecto a las mujeres, que a mí sí se me daba bien, se me daba bien relacionarme con ellas, y digamos ser una persona divertida, y que ellas se riesen conmigo, y este tipo de cosas, eso sí se me daba bien, pero ya está, es decir, ya se acababa, no había nada más, o al menos, a ver, no te quiero decir que nunca me hubiese enrollado con ninguna chica, pero, desde luego no con las que a mí más me gustaban, eso seguro que no. Entonces, yo, digamos, tuve una trayectoria de, bueno, tuve si una primera experiencia, donde una amiga mía, fue la que me entro, mí primer beso, digamos, fue así, fue una chica que a mí me entro, cuando yo era adolescente, entonces a mí se me quedo esa idea grabada en la cabeza, de que son las tías las que entran y las que te besan a ti, y ya está, entonces yo, claro, esa fue mí primera experiencia, se me marco, y dije bueno, vendrán entonces muchas otras veces, ahora lo pienso en retrospectiva y digo “ostras, podría haber pasado algo más”, pero no paso lo que yo esperaba, yo esperaba y esperaba, y nada. Luego tuve otra época, cuando esto de internet y tal que, use más los chat, y tal y cual, y bueno, pues, conocí a muchas chicas, pero, los resultados que tampoco era muy satisfactorios, algunas de ellas, ahora pienso y dices, “es que no valían nada”, y aun así, pues, me mandaba a paseo, lo cual fue muy duro, y todo esto al final, te labraba, te mete una imagen en la cabeza, o te mete una idea en la cabeza de que tu no vales, de que son otros los que están con las chicas más guapas, las que llaman, las que más valen, pero tu no, no sabes porque, pero tu no.
Ray: ¿Y cómo llegas a la idea, o a la conclusión, o lo que sea, de que esto se podía aprender y había alguien que lo pudiera enseñar?, o sea, porque yo sé que eso es un poco, yo algo con que me encuentro muy a menudo desde hace una década, es gente que dice “pero eso no funciono”.
Alberto: Pues, mira, yo recuerdo, que se me ha quedado grabado, un amigo mío que me dijo, éramos todos jóvenes, y a mí me dijo “es que las chicas”, entre risas me dijo ahí, “las chicas hay que meterles caña, jaja, hay que meterles caña”, y yo, me quedé absolutamente contrariado, y dije “¿cómo?, ¿cómo puede ser esto?”, porque por un lado, vez las películas y tal que te dicen “hay que tratarlas perfectamente”, y luego viene tu amigo, que se lo habrá dicho alguien en su pueblo, algún hermano mayor, o cualquier, yo que sé, “hay que meterles caña”, además que ahora lo pienso y digo, además que, él no tenía ni puta idea cuando lo decía, pero lo había oído y dijo, empezó “esto queda bien y yo lo voy a repetir”, sin saber, entonces, yo pensando “esto no puede ser, no puede funcionar”, entonces sí que fui muy escéptico a este tipo de ideas, con lo cual ya imagínate el panorama, entre que por un lado, los resultados son sub óptimos, y encima, no te crees estás cosas, pues así estuvimos, y, cuando descubrí esto, pues, en un momento en mí vida, que bueno, de especial bajón, en este sentido, de casualidad escuche un audio, de bueno, en un podcast, una entrevista a Mario Luna, y él contaba un poco una experiencia que había tenido en una playa, y contaba que se había acercado una chica, y tal, y que cual, y a mí, yo estaba, me acuerdo que estaba, bueno, corriendo por la calle, haciendo un poco de ejercicio, escuchándolo y pensando “este tío es un, vamos, es que no me creo ni una palabra, pero es un chulo que no…”, pero, bueno, dije “cuando vuelva a casa lo miro”, volví a casa, y me metí en internet, vi la web, empecé a ver vídeos, y me convenció, me dio una razón científica de todo esto y dije “ostras, pues igual tiene algo de razón y vamos a ver qué hay aquí”, y bueno, empecé a mirar más, y más, y más, y bueno, pues ya te digo me convenció y empecé a estudiar, este tema.
Ray: Sí, a partir de ahí, bueno, yo te conozco en un campamento de verano.
Alberto: Sí.
Ray: Pero bueno, yo creo que antes de eso, hiciste algunas cositas más.
Alberto: Exactamente. Sí, yo conocí esto, hace ya 5 años, y el campamento fue un año después de aquello, entonces yo estuve básicamente durante ese año leyendo mucho, porque, ya te digo, yo era muy escéptico, y no lo creía, y entonces, pues, leía a Mario Luna, veía sus vídeos, los tuyos también, allí empecé a conocerte por YouTube, y a otros instructores, y sobre todo también vi mucho de lo que había en Estados Unidos, y también en Inglaterra.
Ray: ¿Qué tal?, ¿qué tal todo eso?
Alberto: Pues, bueno, la verdad que bueno, todo eso era más o menos lo mismo, pero sin, en mi opinión, en mí humilde opinión, el que mejor lo explicaba, o el que mejor lo transmitía erais vosotros, eso es así, y algunos americanos se apoyaban más, por ejemplo, en el tema de conversaciones, de cómo llevar una conversación, otros se enfocaban más en otras cosas, pero al final los que los llevaban, vamos, los que hablaban de todo en global era los que la SG y las dinámicas sociales.
Ray: Si ya, eso, ahí yo, bueno, confió bastante que hay por ahí en términos anglosajones, hay, bueno, hay cosas bastante buenas por ahí, también, hay de todo…
Alberto: Seguro.
Ray: …hay de todo, pero si que es cierto que la sistematización, pues, gracias a Mario con…
Alberto: Exactamente, es que es la noche y el día, o sea, yo no he leído un libro como ese, y he leído varios en inglés, y no me parecen, vamos, que están a la altura ninguno.
Ray: Sí, y yo también he leído bastantes y eran muy de ideas sueltas, de cosita que sí, que sí que eran acertadas, pero que ya, que esto cuando lo ubicas, como lo utilizas, eso, que voy así por la vía había uno me acuerdo, que se llamaba creo que Mode One, que era muy bueno, ahora, era un concepto interesante para sexualizar, pero, no me acuerdo tampoco del autor, pero era, vamos, que era, se sexual, ¿vale?, se realmente, no seas indirecto, básicamente, ser directo, y eso hombre, como concepto es un concepto, hay veces que esta muy bien, pero no, además un libro que era todo el rato, o sea, no sé cuántas paginas fueron, pero era todo el rato del mismo concepto, venga, y ven a encontrar aventuritas, y decías, “ya, pero, dame más, dame algo solido de donde cogerme”.
Alberto: Ellos te explican el método que a ellos les funciona, y que casa con su personalidad, pero eso, tu personalidad puede ser totalmente diferente, y eso es lo que ellos no tienen en cuenta, y en mi opinión Mario Luna sí lo tuvo, o sea, es algo más científico global, llámalo como quieras, pero se adapta a cualquiera.
Ray: Sí, sí, él hizo un sistema que cualquiera se puede sentir identificado, situarse, ubicarse y decir, “a partir de aquí, ya puedo trabajar”, y hay muchas herramientas que después, “mira, esta no me siento a gusto haciéndola”, “pues no te preocupes, hay muchas más que puedes hacer”.
Alberto: Exactamente.
Ray: Muy Bien.
Alberto: Y entonces, en este contexto fue cuando, yo ya habiendo leído y sabiéndome sobre todo la técnica, también empecé a practicar, primeramente, al principio, pero cada vez más, y ahí fue cuando decidí dar el salto de ir a un taller contigo.
Ray: Correcto.
Alberto: Y ahí fue, totalmente mí cambio, yo diría que empezó ahí, realmente a mejorar de verdad, empezó después de ese taller.
Ray: Eso fue en una convivencia de verano de una semana, en la cual vamos en total seis personas, me recuerdo que era Paul y yo, los instructores, y bueno, la verdad es que un grupo muy majo, me acuerdo perfectamente de todo, precisamente hoy, por casualidad he encontrado fotos de todos, y dije “ostras qué bueno”. Y bueno, lo recuerdo con mucho cariño, y bueno, y mucha gente que estuvo allí, o sea, muy contenta, pues, desde luego, no ha seguido por ejemplo tu trayectoria, quizás no ha empleado el tiempo que has empleado tú, quizás no ha hecho todo lo que tú has hecho, o sea que es por lo que hiciste, creo que dijiste que te comprometiste contigo mismo…
Alberto: Sí, sí, sí, sí, yo, yo, hubo un día, me acuerdo perfectamente, que me dije a mí mismo, cuando descubrí todo esto y digamos que me lo creí y dije “Alberto, hoy a empezado una nueva vida para ti y a partir de ahora vas a hacer todo lo posible por saber todo lo que puedas, y por ser lo mejor que puedas, en esta área, que hasta ahora no has sido feliz del todo, pues ahora tienes que ser lo mejor que puedas, y me comprometí conmigo mismo.
Ray: Sí, no, efectivamente, o sea, la determinación dio sus frutos, habrá gente ahí, todavía tengo contacto con algunos también, y unos van mejor, otros pues, también hay gente que un poco se deja envolver por las circunstancias, no sé si como una especie de redención, de semana de desmelenarse, hay algo de inercia, pero bueno, si luego esa inercia no la alimentas, pues bueno, vuelves a tu vida. Y bueno, y también es verdad que, en tu caso, pues tú, pues, no vives en España, estás en el extranjero, y eso pues tiene su hándicap…
Alberto: Exactamente.
Ray: … estar en el extranjero y ahí, pues, hay que adaptarse a otra, digamos cultura, idioma, y todo eso tiene…
Alberto: Tiene sus pros y sus contras, porque, claro, digamos que todo lo tengo que hacer en inglés, y a mí, pues, se me da bien ahora, digamos ligar en inglés, incluso, te puedo decir que hasta me parece raro ligar en español.
Ray: Eso pasa.
Alberto: Pero bueno, que al final también el hablar en español hace falta, pero tengo ya muy metido lo de hacerlo en inglés, pero, también pues te abre esa, al haber salido de mí país, y de mí gente habitual, pues, he conocido mucho más gente de diversas partes y también, pues, como te puedes imaginar he conocido a mujeres de muchos países, y eso claro, y de países, no voy a nombrarlos, pero de países que yo jamás pensaría que podría haber estado con una mujer de ciertos países, que dices “ostras”, pero en ese país no tienen que llevar, bueno pues…
Ray: Claro, que es lo que sucede cuando una mujer se va de su habitad, se va de vacaciones, se va para otro sitio, o esta de erasmos, o algo de eso, pues, ahí un poco se adecua a esa cultura, y se, un poco desmelena, y los factores, eso, hay pros, hay pros.
Alberto: Hay contras y hay pros.
Ray: Al final si sabes gestionar las contras y aprovechar los pros, pues, pasa algo.
Alberto: Exactamente.
Ray: Bueno, y entonces yo recuerdo que no sé si paso 1 o 2 años, desde del curso, que volviste a contactar conmigo.
Alberto: Sí, yo desde el campamento, de aquel, estuve practicando, cada vez más, además es que vine renovado, con ideas nuevas en la cabeza, ya habiendo visto como os movías tanto tú como Paul, y también recuerdo que eso es una cosa que yo no esperaba, que había exalumnos de otras años, por ahí pululando, porque les había encentado la experiencia, y querían repetir, simplemente por estar y por pasárselo bien, y a mí eso, dije “joder, es que esto es muy, da muy buen rollo”, y bueno, después de haber visto y vivido todo aquello, y haber estado entre, digamos, grandes seductores, pues algo se te pega, y yo vine aquí muy a tope, y muy de “venga, vamos a empezar”, y ahí empecé a hacer juego diurno, y a salir más, me busque gente con la que salir por la noche y por el día, y a practicar bastante, y bueno, digamos, empecé a salir, y luego aparte con las mujeres con las que dormiría días, o amigas de lo que sea, pues, que conocía, y entonces la verdad que empecé a ver resultados, relativamente pronto, o sea, ya, sí, sí, a los pocos meses ya empecé a ver resultados, no era algo estable, digamos, era de vez en cuando, relativamente, pero ya empezaban a suceder con relativa frecuencia.
Ray: Pues, te voy a cortar un segundo, porque has dicho una frase muy bonita, que quiero recalcar a los oyentes, que tu has dicho, “en relativamente poco tiempo, a los pocos meses”, eso es algo que es una mentalidad de una persona comprometida, porque, la gente a los pocos días, de no ver resultados dicen “madre mía, esto es imposible”, y tú has dicho “al poco tiempo, a los pocos meses”.
Alberto: A los pocos meses, efectivamente, a los pocos meses.
Ray: Eso, claro, que es fundamental darse cuenta que igual son 2 o 3 meses los que necesitas, pero hay que seguir ahí.
Alberto: Sí, sí, sí, sí.
Ray: Ya tienes esa óptica de que “bueno, ya sé que esta es una carrera de fondo, que estos es un día a día, que no es cuestión de hincharme a poner piedras para hacer un castillo en un día, sino que tengo que ir un ladrillito al día”, y a lo que te das cuenta a los 3 meses dices “ostras, ya tengo la primera torre levantada, esto lleva pinta de tener”…, bueno pues, continua, era un poco para ayudarte, pero quería remarcar eso para que la gente que escuche diga “valga”.
Alberto: Claro, la gente que lo escucha lo tiene que tener claro, esto es una carrera de fondo como tu lo has dicho, esto va de mejora personal, esto va de mejorarse cada día uno mismo y lleva tiempo, entonces, un día cambias el peinado, otro día te compras una camisa mejor, otro día sales a correr, otro día tal, y al final todo se va acumulando, y te conviertes en una máquina.
Ray: Y al final, lo que se decía de que la atracción no es una lección, si que es una lección, tu eliges ser más atractivo…
Alberto: Exactamente.
Ray: …y haces el camino para forjar tu atractivo, y decir pues eso, igual que has comentado una camisa, un peinado, pues también decides empezar a ser más sociable, empezar a decirle a una chica cosas que te gustan de ella, y aguantar ese nerviosismo de a ver cómo responde y decir, “ay va, pues ha respondido muy bien”.
Alberto: Y sigo vivo, no pasa nada.
Ray: Exactamente, y no me ha dolido, es más, casi me ha dado un golpecito así en el hombro, que me ha gustado, o sea, así como de “ay, que tonto eres”.
Alberto: Exactamente.
Ray: Estás reaccionando, o sea, que, vas haciendo los pasitos cada día, a mí esto me da un poquito de vértigo, pero lo voy a hacer, y cada día vas saliendo de tu zona de confort, poco a poco, hasta que tu zona de confort te es muy grande, inmensa, y estás en tu…
Alberto: Y estás en tu habitad en cualquier parte, empiezas a, si vas a una fiesta, estás ahí, estás en tu salsa; que vas por la calle, estás en tu salsa; vas a un curso de no sé qué, estás ahí, incluso te llegas con las compañeras de trabajo, que eso ya te digo yo que prefiero no meterme en ese mundo, pero también, es decir, también, en cualquier lado, y eso es que es invaluable, vamos.
Ray: Lo bueno e inteligente de esa habilidad, de haber desarrollado esta habilidad, es que, no tienes que, por ejemplo, en tu trabajo, puede ser delicado, pues no lo necesitas, puedes prescindir precisamente de las chicas que te atraigan en tu entorno de trabajo, porque, sales a la calle y tienes infinitas, no estás pensando “ay, es que como no tengo otra opción, pues esta que me hace un poco de caso, voy a ver si le pido, y empiezan los problemitas, pueden empezar, o sea que, te dan muchas opciones que es lo bonito de esto. Bueno entonces tú, notas ese cambio, empiezas ahí a, bueno, yo iba a decir picar piedras, pero no es el termino, sino que empiezas con emoción, con ganas, a probar, a probar, a probar, disfrutando del proceso, a pesar de que estás saliendo, pero, el secreto realmente es eso, es hacer lo mínimo necesario para sentir vértigo, pero, que no sea un esfuerzo tal que lo dejes a los tres días, seria un poquito todos los días, y, a los meses notaras esos primero beneficios, se empiezan a ver resultados. Y, pero bueno, paso, no sé, pasaron 1 o 2 años…
Alberto: Yo creo que sí, fueron como casi 2 años, no llegaron a los 2 años, sí, contacte contigo, porque bueno, pues había, tenía 2 chicas, que eran, bueno, las había conocido a través de amigos míos, y bueno tenía digamos su teléfono, y no les veía de normal, ¿vale?, y, pero digamos que estaban muy receptivas en el móvil y teníamos conversaciones, tampoco eran muy largas las conversaciones, esto de hablar mucho por WhatsApp no, pero, una conversación picante y bueno, y vi que a veces hay receptividad, y, bueno pues, digamos que con una de ellas, justo era la época de 14 de febrero, del San Valentín, y le dije una broma de quedar ese día, le hice la broma no, le dije de quedar ese día, y me puse así como con muchos corazones, y qué tal, y qué cual, como “ay, es una cita”, y luego, al poco, el día anterior o así me la cancelo, y yo ahí use esto de ganador ganable, ganador perdible, me vine muy arriba, y, no te digo que la mande a la mierda, pero si que la puse, le dije que me tenía que respetar, y que cual, entonces digamos que fue una respuesta, esto ya, bueno, fue una respuesta un poco demasiado agresiva, digamos, ahora lo veo con retrospectividad y digo “ostras”, y aquello digamos no funciono del todo lo que yo esperaba, eso por un lado, y luego por otro lado, la otra chica, pues estaba que si el novio, y no sé qué, y no le quería poner los cuernos, la tía, es que ya me había besado con ella, y bueno, es que estaba hay con muchas dudas, de que no quería dejar a su novio, y tal, y en ese, entonces estaba con estás dos y dije, “voy a preguntar a Ray que seguro que algo aprendo o a ver qué puedo hacer”, y ya te, bueno, no iba muy convencido sinceramente cuando empecé a hablar contigo y dije, “a ver qué me cuenta”.
Ray: Sí, hay me acuerdo que hicimos una, contrataste unas asesorías, porque yo estaba en Londres, tú estabas en Europa…
Alberto: Fuera, sí.
Ray: …era, no podíamos vernos, evidentemente, y me acuerdo cuando acabo, cuando acabamos las sesiones, que me confesaste, me dijiste “mira, tengo que confesarte, de fe, con poca fe, a ver si esto funciona, porque, evidentemente pues, en persona esto es más efectivo, y que tengo que decirte que me has sorprendido mucho”.
Alberto: Pero muchísimo, muchísimo, porque, a ver, esas dos chicas me gustaban especialmente, ¿vale?, especialmente más de lo normal, entonces, digamos que, dije “esto merece un esfuerzo extra por mí parte”, y lo que más me gusto de aquella tutoría, fue que me di cuenta, que por mucho que yo hubiese leído y me creyese que sabía, pues que todavía me quedaban cosas por aprender, y que tu supiste, vamos, mostrarme el camino y decir “sí, pero, es que estás fallando en esto”, “es que no te das cuenta de que no has interiorizado el tema de…”, bueno, fue lo de la, lo de ser reactivo, y de quererla bajo cualquier circunstancia, yo me quede con esa idea, de que quise quererla siempre y que de reactivo nunca, e incluso para echarle la bronca entre comillas, nada, nada de eso.
Ray: Sí que amor incondicional…
Alberto: Amor incondicional, exacto. Exactamente.
Ray: …interés condicionado.
Alberto: Eso es, y ahí fue cuando interioricé ese concepto, tal cual, ahí me di cuenta y dije “ostras, es verdad”, estoy fallando en eso.
Ray: Que yo me acuerdo que estuvimos ahí un poco oyendo las conversaciones, y sobre todo eso, enfocándome ya no en sus respuestas o en lo que ellas te decían, sino en cómo tú interpretabas esas respuestas tuyas, y cómo respondías, o sea, tu reacción ante las reacciones de ellas.
Alberto: Exacto, Exacto, exacto.
Ray: Y bueno, y parece ser que las cosas empezaron a cambiar y fueron a mejor.
Alberto: Sí, sí, sí, fueron bastante mejor, sin duda, sí, sí. A ver, que tampoco es infalible en el sentido de que vas a pasártelas todas jamás y siempre, pero, esto es una probabilidad, es decir, no, también hay ciertas circunstancias que tu no puedes controlar que están fuera de tu área de influencia, pero que desde luego mejoraron bastante sin duda. Y, este tema de quererle, el amor incondicional, luego lo he usado con otras chicas, y fantástico, mano de santo, que se diría en… sí, sí, no, es que, ellas necesitan alguien que las quiera, las entienda, y que no sé vuelva loco cuando ellas se vuelven locas, es que eso es así.
Ray: Claro, si tu no les proporcionas estabilidad, es más probable que ellas se desestabilicen, y sobre todo, pues, esto, la chica que hablamos, que esta con su pareja hecha un lio, está ya muy inestable, tu no eres el pilar estable en el cual apoyarse, pues evidentemente no sé va a apoya ahí, y va a decir “ya, ya, me atraes, pero no eres la solución o no eres lo que me va a dar paz, sin embargo cuando vio que tu ya, pues eso, podía estar tranquila contigo, y una cosa muy importante también, es, lo que más hay que cuidar de una mujer…
Alberto: Que es su reputación.
Ray: Su reputación.
Alberto: Efectivamente.
Ray: Si su reputación está completamente a salvo, pues automáticamente cuando lo sienten dicen “yo sé que, con este hombre, mí reputación no tiene ningún peligro”, pues empiezan a pasar cositas. Empiezan a florecer.
Alberto: Exactamente.
Ray: Aquí, lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas.
Alberto: Exactamente.
Ray: Muy bien, y bueno, a partir de ahí entonces, empezaste a aplicar ciertas cosas, bueno yo, tengo que recordar que fueron las dos cosas más importantes que trabajamos.
Alberto: Sí, sí, yo me quede desde luego con esas dos cosas.
Ray: No sé si hablamos de, bueno, sobre todo cual fue tu reacción frente a la reacción de ella, una cosa muy recurrente, pero bueno, normalmente pues eso, lo que hago cuando estoy trabajando con alguien es, más que darle millones y millones de información, que puedo, una cosa que decía creo que era Bruce Lee, que era “si quieres no enseñar algo a alguien, enséñaselo todo de golpe”, cuanto más le enseñes, mejor, para que no aprenda, sin embargo, si quieres que aprenda, pues, enséñale un único ataque, enséñale, no solo uno únicamente, sino el mejor ataque para esa persona, si por lo que sea es alto, pues igual el mejor ataque es que meta un puñetazo a la cabeza del oponente, si es bajito, que le de patadas a las rodillas del oponente, lo que sea, pero encuentra cuál es esa arma que más efectividad le va a dar a esa persona, y trata de que la practique, la interiorice y sea su arma más poderosa. Y cuando esa arma sea muy buena, volverá y dirá “oye, con esto he hecho estragos, pero siento que puedo aprender más y que puedo hacer más estragos, vale, pues, volvemos a trabajar. Y bueno, un poquito, es el caso actual, recientemente tu fuiste progresando, fuiste, bueno, realmente cuéntame un poco cuál fue lo primero que me dijiste cuando empezamos a hablar que me reí.
Alberto: Sí, bueno, pero te cuento simplemente desde la última vez que hablamos, básicamente yo seguí progresando y como bien has dicho, aplicando este nuevo concepto, yo me veía como una nueva versión de mí mismo, con una nueva arma poderosa, y que francamente es que me fue muy bien, para mí fue muy importante este tema de quererlas incondicionalmente, para otros Atractores que nos estén escuchando puede ser otra cosa, pero yo estoy seguro que tu se lo vas a encontrar. Pero para mí esto fue a lo mejor, lo que me faltaba en el arsenal, y desde entonces pues, fue bastante bien, es que realmente tu vida cambia tanto, porque no solamente es el hecho de poder, de ir conociendo a las mujeres, que te relacionas con muchísimas más, de que por supuesto tienes más sexo y todo esto, pero también un monto de experiencias, de viajes y de cosas que se ven que es que merecen muchísimo la pena, francamente, y yo, pues, estos últimos, pues verdad que ya, verdad que fue muchísimos años ya, pues, entonces, disfrutando muchísimo de experiencias, pues con unas cuantas mujeres, la verdad no me puedo quejar, y bueno, qué paso, pues…
Ray: Además tengo que añadir que por lo que hemos hablado, que evidentemente no vamos a compartir con la audiencia, porque esto es íntimo, pero sí que tengo que decir que, lo que he visto es un patrón de relaciones sanas, o sea, de calidad, ya no de…
Alberto: Sí, sí, sí…
Ray: Aparte de que el número probablemente es envidiable, independientemente del número, hablamos de que ya no solo que haya mujeres con las que hayas pasado experiencias estupendas, sino que, alguna de ellas son experiencias continuadas, en las que os nutrís el uno al otro, y en la que es muy de tu a tu, no es un poco la visión esta que tenemos de que el hombre se aprovecha de la mujer…
Alberto: Para nada, para nada…
Ray: …y lo que quiere es cuantas más en la recamara mejor, más mujeres en la recamara o en donde sea, sin embargo, tú, bueno eso, no buscas realmente cantidad, que, sin comerlo ni verlo…
Alberto: Efectivamente, lo de la cantidad es algo que surge de eso y más, pero, a mí me han dicho, me han reconocido algunas chicas cosas muy bonitas que a mí se me han quedado grabadas, como de que les traigo alegría a su vida, y cosas así.
Ray: Que se sientes comprendidas.
Alberto: Sí, sí, sí, sí, se sienten realmente comprendidas.
Ray: Igual son super sinceras contigo y dicen “yo estás cosas no sé las he contado a otros chicos, porque ese chico me juzgaría, y tu no me juzgas, me siento como, me siento entendida, comprendida, puedo ser yo misma, y no me siento pues igual una puta, estando contigo, y eso que estoy haciendo cosas que otro igual diría, “ostias tu eres un poco suelta”.
Alberto: Sí, tu, no las juzgas, ni cosa parecida, y ellas se sienten totalmente pues tranquilas a tu lado.
Ray: Y son naturales.
Alberto: Y confiadas, y es que esas son cosas que yo digamos que no sabia que iban a suceder, pero bueno, suceden.
Ray: Esta claro, cuando se hacen las cosas bien, suceden.
Alberto: Claro, claro. Y ya te digo, te dicen cosas y te reconocen cosas que ahora, es cuando ya de verdad te lo crees, no, que, digamos que cuando ya te lo dicen ellas, que es que “tío, como tu no he conocido a ningún hombre antes, hay como muy, muy, muy pocos como tú”
Ray: Además, ahora recuerdo que cuando hicimos las primeras sesiones online, que tu carecías de confianza en ese aspecto, que decías “es que no me lo termino de creer”, y decías “ostia, es que creo que…”, faltaba ahí algo para tener esto también, sin embargo, pues, la evidencia, el vivirlo, y dices “coño, pues, si lo vivo, lo veo, y encima me lo confirman”.
Alberto: Y encima te lo dicen con palabras.
Ray: Si yo lo veo que digo “esta chica esta muy a gusto conmigo”, pero encima me lo narra, pues ya, qué dudas voy a tener. Y bueno, entonces, eso, todo fue viento en popa.
Alberto: Sí, sí, todo ha ido bien, yo incluso, digamos, bueno, siempre he seguido practicando, pero ya, entre comillas no por necesidad, simplemente porque van surgiendo nuevas oportunidades en tu vida, y tu ya tienes la costumbre.
Ray: Sí, tienes la habilidad que es tu forma de ser.
Alberto: Claro, ya forma parte de ti, y te sientes raro si no eres así, con chicas que te atraen, es que te sientes raro, es que dices “¿pasa algo?”, yo, ¿sabes?, y entonces, ¿qué pasa?, que, o sea, todo eso esta muy bien para mí, pero mí entorno más cercano, pues, ellos van viendo, como, digamos que, que te, bueno, que van viendo que tu tienes una vida que ellos, pues, no tienen, y surgen, pues, ¿qué surgen?, las envidias, y los celos, y entonces…
Ray: Y además, a nivel muy inconsciente.
Alberto: Exactamente, todo totalmente inconsciente.
Ray: Porque evidentemente una de las cosas que miramos, que cuidamos mucho es, un caballero, un atractor, vamos a hablar, pues no cuenta sus hazañas, por así decirlo, porque es que, más que nada porque, y si se lo cuentas a alguien que no toca, se jode todo el material.
Alberto: Exactamente.
Ray: Entonces, claro, ellos no saben nada, realmente, porque además no es de su incumbencia, pero perciben cosas, dice “aquí algo se me esta escapando, y algo que parece que mola”.
Alberto: Exactamente, y que a mí se me escapa, y que yo no tengo en mí vida y hay algo que falla aquí, y este chico por qué cada vez que vamos a una fiesta, pues acaba rodeado de las chicas”, no te digo yo que todas se me abalancen, pero que me muevo perfectamente y muy a gusto entre ellas, las mujeres, y ellos no, y entonces ahí es cuando yo empecé a notar críticas, sutiles, por tonterías, por cosas que no vienen al cuento, ya está, ¿sabes?, y una tras otra.
Ray: Inclusive, intentas ayudarles y dicen “tío, es un caso tuyo chungo, por qué no haces esto”, y “tú qué sabrás”.
Alberto: Sí, sí, a mí se me ha quedado grabada una de estas, porque yo, también te digo, mis amigos más cercanos que les he visto mal con estos temas, les he intentado ayudar, a todos, luego a veces he pensado, “quién me llama a mí a meterme en estás cosas”, pero bueno, yo te digo, por lo menos mí conciencia queda tranquila, yo lo he intentado, y a algunos pues les he estado hablando de este mundillo, y recuerdo uno concretamente que me dijo, “espero a que me hables de un libro”, “y ya me espero a que salga la película”, y dije, y yo pensé, bueno, pues, esto es costumbrismo tío, o sea, tu mismo, qué voy a hacer yo ahí, no, pues, ya está, y así estamos.
Ray: Tienes la opción de hacer tú la película, y un poco más.
Alberto: Exactamente. Porque, claro, es verdad que mucha gente, a los hombre, eso lo sabes tú, lo sabe toda la audiencia, les cuesta reconocer que es algo con el tema de las mujeres, pues, porque se supone que hemos nacido programados para…, pero bueno, pues no es así del todo, y encima se ve mal que se estudien estás cosas, que cualquier otra disciplina, de la vida, de la, lo que sea, de la ciencia, psicología, lo que tu quieras, es normal estudiar, ahí nadie les acusa de si es muy bueno en matemáticas, “ah, es que llevas toda la vida estudiando matemáticas”, claro que eres bueno en matemáticas, nadie diría eso, pues, evidentemente, evidentemente, pero en este mundillo sí, y entonces hay gente que le cuesta mucho aceptarlo, y ahora no te digo yo que ven a uno, que tu le vez y encima te lo diga a ti a la cara “oye, es que tu no”, pero yo iba siempre de buen rollo, siempre de intentando ayudar, pero bueno, pues, algunos amigos sí que, me han seguido, digamos, y han progresado, y luego me han agradecido, pero otros muchos no.
Ray: Claro, sí, no, yo, bueno a mí también me pasa, yo, aquí en este ámbito, soy, tengo autoridad, o sea, para los que me seguís, y a los que confían en mí, pues, además, bueno, hay avales, y lo habéis comprobado en vuestras propias carnes, pero a veces, estoy por ahí en alguna cena, o en algún lado y sale la conversación “¿y tú a qué te dedicas?”, y vamos, el rollo cuñadísimo, vamos, todo el mundo sabe más que yo, “pues eso es así”, y yo, “a ver, bueno, puede pasar, pero”, y al final, no, al final no, a los 2 minutos si llega la conversación, normalmente yo estoy callado, mientras todos me están enseñando, dando lecciones de cómo funciona todo, y yo asentando a veces, dando aires de, “oh, sí, sí, tal”, aunque estén diciendo la mayor burrada del mundo, que dice, “no voy a entrar porque esto”, claro, no sé, no tiene mucho sentido, rara es la vez, que pasa alguna vez, que se paran, me escuchan, digo cosas, y empiezan “ostras, me están escuchando, creo que están interesados”, claro, porque sí que pasa con gente que me conoce, gente que ya me conoce, gente que ya me conocéis, pues si hablo, si la gente escucha, porque si no, es al revés, es “espera que yo”, o lo típico que tu cuentas una anécdota, bueno, eso es algo bastante común, “pues a mí no me ha pasado nunca, a mí me pasa lo contrario”.
Alberto: Sí, sí, sí….
Ray: Vaya, por Dios, puede ser, puede se que pase lo contrario, pero, pasa lo contrario o estás tratando de llamar la atención en la conversación para que nos fijemos en ti, o lo que sea, no sé, yo personalmente no tengo ningún afán de protagonismo ya, menos en una temática que, que más o menos controlo, aunque no todo, por supuesto, pero que desde luego no necesito demostrar nada, y como hablo bastante del tema, posiblemente, pues en mis ratos ocio, casi, casi me apetece…
Alberto: Evitarlo, claro.
Ray: Sí, prefiero hablar de otros temas que también me apasionan, como emprendimiento y etcétera, y otras cosas que solo, de cómo ser más atractivo, está muy bien, pero claro, cuando hablas muchas horas de eso, pues, apetece tratar más temas.
Alberto: Es verdad, claro que sí.
Ray: Pues nada, yo personalmente, estaría muchísimo más tiempo sacando más historias, porque hay muchas anécdotas ahí que hemos compartido y que se verían muy bien, pero, el tiempo apremia, me estoy planteando no hacer podcast muchos más largos de los que he hecho normalmente, que ya me he pasado, el ultimo creo que era veinte y poco de minutos, creo que ese es un nuevo récord, y bueno, y también, las horas que son, tú ya tendrás que descansar para mañana, así que, nada, yo te quiero agradecer de todo corazón, pues eso, que me hayas aguantado, despegado hoy, porque me he retraso, y etc., etc., además que ya me has dicho que o lo hacíamos hoy, o ya…
Alberto: Sí, estaba muy complicado, todo después. Pero yo cuando me lo propusiste, lo pensé, que luego dije, “pues, claro que sí, cómo no, él me ha ayudado y yo después le tengo que devolver el favor”, y si esto es de la manera humildemente que puedo hacer, pues, encantado de la vida, vaya, es que no puedo decir más, yo te agradezco mucho todo lo que me has aportado, no solamente en las tutorías, pues en los talleres y todos los videos de YouTube, y todo el contenido que produces, en los podcast, etc., y ánimo a toda la audiencia, a todos los Atractores que hay allí, que se pongan con este camino porque de verdad que merece muchísimo la pena, pero muchísimo, es que, y además, llego un momento en mí caso ahora mismo, que el tema de las mujeres ya casi que, ya no es una cosa que me, que este pensando en ello constantemente, a mí empieza a darme igual, ya…
Ray: Pero bueno, claro, un tema que no hemos tratado, pero bueno, tampoco quiero entrar mucho es que, que tu estilo de vida dual, pues bueno, tu que si aprendes baile, que si aprendes piano, que si aprendes…
Alberto: Sí, claro.
Ray: …que eres una persona con mucha…
Alberto: Curiosidad, y con…
Ray: Claro, y no estás dependiente, necesitado, pues, de eso, de esa carencia de amor.
Alberto: Para nada.
Ray: La has controlado, has hecho tu trabajo, y claro, por eso te decía que yo, un poco te envidio, porque tu estilo de vida, pues, yo aspiro un estilo de vida así, yo por circunstancias tengo también cierto bagaje, pero, pues, hay momentos y situaciones en los cuales hay cambios, y estoy un poco out, y tu por lo que yo sé, pues llevas una trayectoria muy chula, desde hace ya, creo que desde ese entonces, una trayectoria de crecimiento, y crecimiento, y crecimiento, de Kaizen, pues, todo los años, y claro, hasta el punto de que, pues, por mencionarlo de una manera muy sutil, pues hablamos de una chica que, yo creo que cada vez que le cuentas algo, se mosquea porque es que, mola demasiado en tu vida, y en lugar de generar atracción en su caso, pues genera una envidia inconsciente, es decir, “seguro que no he molado tanto en tu vida, tío, pero no me jodas”.
Alberto: Sí, sí, sí, y además que lo que yo te contaba, yo siempre estoy con cosas, y yo siempre estoy pensando, ahora estamos en julio, y ya estoy pensando lo que en enero voy a empezar a hacer, tal vez, ya estoy con estás cosas, ya me he propuesto este año aprender una serie de cosas, el año que vine tengo otras, y estoy así siempre, entonces, si a mí me preguntan, me hablan conmigo cada 2, 3 meses, “¿y qué es lo nuevo?”, “pues estoy con tal cosa”, y dice “ostras, pero si hace 3 meses estabas con otra cuestión, pero ya he aprendido, ahora lo siguiente, yo estoy mucho así, esa es ya mí manera de ver la vida, y mí manera de, bueno, de aplicar mí mejora personal, o llámalo como quieras, pero también esto.
Ray: Sí, pero, esto también es porque vas solucionando facetas de tu vida, y conforme te vas liberando de cargas, es más fácil acumular, por así decirlo, o conseguir nuevas cosas, porque cuando estás con una frustración, como puede ser tu vida emocional, pues, ya puedes ir a hacer lo que quieras, que no hay forma, estás ahí estancado en, “ya, pero me falta esto”, en el momento en que empiezas a rellenar, o sea, quitarte necesidades básicamente, y te quitas el lastre de la necesidad, y quites la voluntad, que es tu caso de “quiero esto, quiero aquello, me apetece aquello, pues claro, tu vida, pues empieza a dar un poquito de asco, por la envidia, y es cuando tus amigos dice “este cabrón, es demasiado feliz”.
Alberto: Claro, sí, sí, sí, es que se nota, se nota, en todos los aspectos, y en eso estamos, ya te digo, vamos, yo encantado de haber recorrido este camino, y, humildemente, lo que me queda, o sea, lo que me queda yo sigo…
Ray: No, yo estoy super agradecido de, de bueno, de que estés aquí, de que, o sea, yo tengo envidia, no sana, por ti, pero a la vez, me alegro muchísimo por ti, o sea, no sabes lo feliz que me haces, saber que cada vez que volvemos a contactar, pues me cuentas que te va bien, que estás creciendo, y que mañana será mejor que hoy, aunque hoy ha sido un día estupendo. A mí eso me encanta, independientemente de que a mí me vaya mejor o peor, ojo, creo que eso es lo importante, porque mucha gente, la envida, he visto un video hace no mucho sobre ella, que claro, ven el éxito de otra persona, y es crítica, es, no me gusta, ¿por qué?, porque yo no lo tengo, porque yo no sé cómo conseguirlo, básicamente porque no me atrevo, y entonces prefiero buscarle defectos, “no sé lo merece, esta teniendo suerte, es que nació con no sé qué”, lo que sea, pero bueno, en tu caso no aplica ninguna, pero vamos que…
Alberto: No, pero ojo, ojo, que por ejemplo, esta chica que mencionabas antes, por ejemplo yo alguna vez le conté, pues, algún caso de éxito con una chica, de la que yo estaba especialmente, bueno pues, orgulloso y feliz, porque era una chica especialmente atractiva, me había gustado y había hecho una buena interacción, y le había proporcionado una buena experiencia a ella, y yo se lo medio dije “tampoco te creas que entre en detalles ni nada”, pero, y me vino a decir que “pues claro hombre, es que tu allí, en un país extranjero, pues, todas, claro, pues porque como eres extranjero, ya está”, y dije, “¿perdona?, pero tú que no tienes ni idea de nada, que por esa regla de tres, aquí cualquiera que se vaya a otro país, ya está”, y perdona, es que no son capaces de ver el esfuerzo que yo he invertido en este tema, y en otros de mí vida, y claro, pues, solamente ven, se creen que he tenido suerte, y de suerte, nada, de suerte nada, yo sé muy bien porque me lo he trabajado, yo he estado abajo y ahora estoy arriba, si se perfectamente la diferencia, vamos.
Ray: Todos los parches intermedios.
Alberto: Exactamente, sí, sí, sí, sí.
Ray: Y ella te habla desde una perspectiva de mujer que se va al extranjero, y una mujer en el extranjero, pues, es exótica, y le tira todo el mundo, pero un hombre, por muy exótico que sea, no funcionan las cosas igual, puede llamar la atención, puede que diga “uy, veo que las chicas están más predispuestas”, puede ser, ojo, pero vamos, es un puede, sencillamente.
Alberto: Y que casualidad, yo que he conocido a un extranjero que residía es este país también y me decía, “yo en mí tiempo, de hace 10 años todas me entraban, todas, todas, todas, ahora ya no”, y digo, “qué casualidad, y a mí no”, yo me lo he tenido que trabajar, joder.
Ray: Sí pero tú piensas en la casualidad que “a mí me entraban todas, pero ya no”, que casualidad que ahora ya no, ya ha pasado, que ya te ha sacado la nacionalidad ¿o qué?
Alberto: Claro, dice ella, chico, a uno que me ha hablado en su época de fucking, “tío, perdona, si la tiene en su época de fucking la mantiene”, eso ha sido, cómo se dice, el que tiene, retiene.
Ray: El que tuvo, retuvo.
Alberto: El que tuvo, retuvo, qué me esta contando en la época de fucking, por favor.
Ray: Se pueden perder ciertas cualidades, pero es que la experiencia…
Alberto: Pero esa actitud, porque forma parte de ti al final es que no, eso es separado de ti.
Ray: Sí puedes perder, ya te digo, igual que en el gimnasio, si dejas de ir pues luego vuelves, y tiene agujetas, pero recuperas muy rápido, te pones enseguida y “ah, ya se cómo funciona”, entonces, si eras un fucker, que ser un fucker hablamos de un tío pues un imán brutal, de repente a no comerte un rosco, es un poco incongruente.
Alberto: Es muy incongruente. Y ahí es cuando te callas y dices, “bueno, déjalo, no quiero entrar porque no quiero dejar en evidencia a nadie”.
Ray: Pues, nada, Alberto, un placerazo, muchas gracias por todo, que pases unas vacaciones estupendas, que ya se que vas a hacer cositas muy interesantes.
Alberto: Sí, estoy preparándola precisamente ahora, así que…
Ray: Y nada, pues, ya sabes, para cualquier cosa sabes cómo contactarme, y bueno, me alegro, me alegro muchísimo de tu buenaventura, y espero que, que bueno, que de ves en cuando me sigas mandando mensajitos, diciéndome a donde me vas a envidiar.
Alberto: Pues nada, que, como te he dicho el placer es mío, yo en lo que te pueda ayudar pues aquí estoy, y al final esto va también del karma, tu ayudas a unas personas, tu vas ayudando a un montón de gente con tus podcast, pues, alguien te tiene que devolver el favor, pues, yo te lo devuelvo de esta manera, otra persona puede hacerlo de otra manera, pero, me encanta que tu sigas generando contenido y ayudando a tanta gente que lo necesita, que le hace falta. Y así que por supuesto encantado de la vida de estar aquí, y nada, un saludo a todos los atractores, y decirles que este es el camino de la mejora personal, y que esto, aquí no hay píldoras mágicas, ni frases mágicas, ni camisas de faker, ni nada de nada, es poquito a poco mejorando y siendo persistente.
Ray: Sí, yo creo que es eso, alinearte con tu mejor yo poco a poco, ir haciendo las pases con tu…
Alberto: Ah, y perdonándote a ti mismo, también, que hay veces que dices “joder, cómo he podido ser tan”, bueno pues, perdónate, que también todos somos humanos y nos equivocamos y hay que saber cerrar etapas también. No estar siempre lamentándose del pasado y tal y cual.
Ray: Totalmente, yo creo que el pasado está muy bien, se aprende de el mucho, pero efectivamente, de hecho, ahora mismo tengo un par de alumnos que están, eso, cerrando heridas, etapas, y están muy en el tal, y están, o me vuelco al pasado, o lo encierro, uno pasa página, pero el pasado es parte de tu historia y está ahí para que aprendas.
Alberto: Para que aprendas, para saber cómo no hacer.
Ray: Para descubrir qué cosas se pueden mejorar.
Alberto: Qué cosas no funcionaron. Es verdad.
Ray: Y ahí está el secreto, ahí está la píldora en todo caso. Bueno, un abracito enorme, y cuídate mucho.
Alberto: Venga, pues otro para ti y que tomes excelentes decisiones.
Ray: Correcto. Mucho ánimo, más energía…
Alberto: Y que tomes excelentes decisiones.
Atractor, el Podcast de Referencia en Atracción. Para ti, hombre, que quieres alcanzar tu máximo potencial y ser tu mejor versión, aquella que te hace sentirte realizado al afectar positivamente a la vida de las personas que te rodean, expandiendo a cada paso tu área de influencia.
Ray Havana.
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